SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Lisandro Macarrulla, pasado presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), declaró que ha faltado voluntad política para resolver el problema del servicio de electricidad en la República Dominicana.
Aunque reconoció la labor que hecho el empresario Celso Marranzini al frente de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), dijo que para el problema del sector eléctrico es estructural y requiere de un compromiso de nación para su solución definitiva.
Al mismo tiempo, resaltó que el sistema eléctrico deficitario constituye una traba que afecta a la sociedad en su conjunto y particularmente a los sectores productivos del país.
Agrego que mal pudiera culparse a la actual gestión de Celso Marranzini de un problema que data desde el momento mismo en que se creó el modelo de gestión pública de ese servicio tan vital para la vida del dominicano y la producción.
“De hecho, desde que era un niño oía argumentos inverosímiles como el impacto en el sistema eléctrico de las “Chichiguas de julio Sauri”, apuntó. “Indudablemente ha faltado vocación política para resolver ese problema que tanto afecta al país y la situación se agrava cuando los precios del petróleo y los demás combustibles se incrementan, y en ese orden las autoridades que han dirigido el sector durante los últimos 50 años no han sido los suficientemente responsables para asumir las decisiones que implica resolverlo”, enfatizó el dirigente empresarial.
Destacó que en la actual administración se han logrado avances que se pueden evidenciar y han sido reconocidos, inclusive, por organismos internacionales, entre los que podemos mencionar la reducción del gasto en más de un 50%, una disminución relativa del subsidio, aumento en la generación y la incorporación al sistema de casi 2 millones de nuevos clientes.
Destacó que en la actual administración se han logrado avances que se pueden evidenciar y han sido reconocidos, inclusive, por organismos internacionales, entre los que podemos mencionar la reducción del gasto en más de un 50%
“Energía y desarrollo son indisolubles porque la primera constituye un eje transversal a todas las actividades que desenvuelve una nación, por tanto si el sistema muestra desigualdad en la distribución de producción y consumo la base productiva y el tejido social se desmoronan”, precisó Macarrulla.
El dirigente empresarial hizo un llamado a los políticos para que asuman un compromiso, no importando la coyuntura política pre electoral, para consolidar una estrategia de recuperación del sector eléctrico nacional dentro del marco de un proyecto de nación que trascienda el limitado espacio de tiempo de un periodo de campaña proselitista.