Sao Paulo, Brasil, 3 oct (EFE/Carlos Meneses Sánchez).- Enrique V. Iglesias, ex secretario general iberoamericano y uno de los referentes de esa comunidad, afirmó que Latinoamérica ha aprendido a "salir de sus problemas sin sacrificar la democracia", al tiempo que apostó por una solución "política" y "económica" para la crisis venezolana.

"Crisis ha habido siempre y va a seguir habiendo problemas de algún tipo, pero no tenemos que sacrificar (la democracia) como pasó en el pasado, cuando frente a un conflicto de cualquier tipo aparecía la solución militar", dijo Valentín Iglesias en una entrevista con Efe en Sao Paulo.

El economista hispano-uruguayo aludió a los "problemas de corrupción" que han salpicado a varios países en la región, sobre todo a raíz del caso Odebrecht, pero subrayó que "las instituciones han resistido bien" a estos escándalos, donde la Justicia "está jugando un papel muy importante".

"La democracia ha demostrado que tiene fuerza como para resolver sus problemas con democracia o más democracia", insistió.

Preguntado sobre las polémicas votaciones en algunos Congresos latinoamericanos que han permitido detener investigaciones por supuesta corrupción contra sus mandatarios, Enrique V. Iglesias insistió en que "lo importante" es mantener las instituciones y que "se vote y se pueda votar en libertad".

Partidario del diálogo y no de la imposición de sanciones, espera que las conversaciones entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición "fructifiquen".

El también expresidente del Banco Interamericano de Desarrollo aseguró que Venezuela vive un "desafío muy grande" y una "crisis económica muy fuerte" de la que solo empezará a salir si hay un "cierto consenso nacional".

"Tiene que haber ciertamente una confluencia de fuerzas que se pongan de acuerdo para tomar decisiones fundamentales y no solamente en el campo político, o las elecciones, también en la conducción económica", expresó.

Partidario del diálogo y no de la imposición de sanciones, espera que las conversaciones entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición "fructifiquen".

Enrique V. Iglesias llegó a Sao Paulo en calidad de copresidente del Consejo Iberoamericano para la Productividad y la Competitividad con motivo de la III Asamblea y Jornada de Reflexión de este órgano formado por medio centenar de empresas iberoamericanas e instituciones internacionales.

En contraste con el convulso escenario político en algunos países de América Latina, la economía regional experimenta "un crecimiento "sustancialmente mejor que los años precedentes", puntualizó.

Consciente de la dificultad de ver en el corto plazo porcentajes de crecimiento parecidos a los de los primeros años de este siglo, A.Latina da "señales positivas" procedentes de dos de sus motores: Argentina y Brasil.

El impulso económico puede ser aún mayor de cerrarse el acuerdo comercial que la Unión Europea y el Mercosur negocian desde hace casi dos décadas.

"Ya es tiempo de que nazca el niño. Creo que se están dando condiciones para que eso ocurra", manifestó.

Negociadores de ambos bloques empezaron esta semana en Brasilia una nueva ronda de negociaciones para intentar cerrar un acuerdo que presenta numerosos obstáculos.

"Uno de los problemas más importantes ha sido la agricultura (…). Ahí ha habido un escollo permanente porque chocó con el proteccionismo agrícola que tiene Europa", explicó Enrique V.Iglesias.

No obstante, en su opinión, la Unión Europea "ha comenzado a tomar conciencia de la importancia" del mercado americano y "la competencia que viene ahora por el lado de Asia" provoca que haya una "mayor voluntad" para cerrar un acuerdo.

En este sentido, puso a China como "un buen ejemplo de los caminos que hay que seguir" en Latinoamérica ya que es uno de los mayores compradores de materias primas en la región y al mismo tiempo "está invirtiendo" y ha reafirmado ser "partidario firme de la liberación del comercio".

"Para nosotros es música celestial porque eso es lo que queremos", dijo.

Entre los retos que afronta Latinoamérica, el economista señala mejorar las infraestructuras, la baja productividad de las pymes y la escasa inversión tecnológica, así como implementar una reforma educativa de calidad y un sistema laboral más flexible sin socavar los derechos de los trabajadores.

"El futuro de América Latina, como el futuro del mundo, pasa por lograr que las nuevas tecnologías, como la digitalización, comiencen a penetrar en todos los niveles de la estructura empresarial", indicó. EFE