WASHINGTON, Estados Unidos (Alfonso Fernández/EFE).- El primer dato de desempleo de la presidencia de Donald Trump en EE.UU. mostró una leve alza de la tasa al 4,8 % y una sólida creación de 227.000 nuevos empleos, informó este viernes el Departamento de Trabajo.

La tasa repuntó una décima respecto al 4,7 % registrado en diciembre, mientras que la generación de trabajo pasó de los 157.000 del mes pasado a los 227.000 de enero.

El principal impulsor fue el sector privado que agregó 237.000 empleos, frente al sector público que sustrajo 10.000.

Los economistas apuntaron que el leve incremento en la tasa de desempleo es consecuencia del mayor número de estadounidenses que están buscando activamente empleo, puesto que la tasa de participación en la fuerza laboral subió de 62,7 % a 62,9 % en enero.

Asimismo, el Departamento de Trabajo señaló que la creación de empleos total en 2016 fue realmente de 2,24 millones, frente a los los 2,16 millones estimados previamente.

"Las cifras de empleo confirman que la economía está todavía avanzando a un ritmo positivo, los suficientemente rápido para mantener la tasa de desempleo baja", aseguró Justin Wolfers, profesor de economía de la Universidad de Michigan.

Otros indicadores parciales mostraron que todavía existe rango de mejora, como el del subempleo (aquellos que trabajan a tiempo parcial y buscan contratos a tiempo completo o han dejado de intentar lograr un empleo), se elevó levemente del 9,2 % de diciembre al 9,4 % de enero.

El indicador de salarios mostró también un aspecto menos positivo, con un crecimiento de apenas 0,1 % en el salario medio por hora en enero, hasta 26 dólares.

Y en el acumulado interanual, de los últimos doce meses, el ritmo de alzas salariales se situó en 2,5 % en enero, el menor desde agosto de 2016, por debajo del 2,8 % de diciembre.

Ajuste monetario

En conjunto, no obstante, el reporte reafirma la buena salud del mercado laboral y abre la puerta a que la Reserva Federal (Fed) prosiga con su anticipado ritmo de ajuste monetario a lo largo de 2017 y eleve los tipos de interés, actualmente ubicados entre 0,50 % y 0,75 %.

El próximo encuentro de la Fed está previsto para mediados de marzo, con una conferencia de prensa posterior de su presidenta, Janet Yellen.

Los mercados financieros recibieron con optimismo el dato de enero y Wall Street abrió con fuertes ganancias, con su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, avanzando 0,48 % respecto a la apertura.

Con estas cifras arranca formalmente la presidencia de Trump, quien tomó posesión el pasado 20 de enero.

El nuevo presidente criticó duramente durante la campaña electoral los datos de desempleo que calificó "uno de los mayores engaños de la política moderna" en EE.UU. e insistió en que la realidad es que el paro es mucho mayor.

En la misma línea se expresó su nominado a dirigir el Tesoro, Steven Mnuchin, quien aseguró el pasado mes en su audiencia de confirmación ante el Senado que esta tasa "no es real".

A partir de ahora, será la agenda económica de Trump la marque el devenir del mercado laboral.

En sus primeras dos semanas en la Casa Blanca, el mandatario ha apostado por el nacionalismo y proteccionismo económico como ejes fundamentales de su mandato.

Los analistas, sin embargo, alertan de que el esperado plan de estímulo fiscal de Trump a través del recorte de impuestos y la multimillonaria inversión en infraestructura y defensa pueden generar presiones inflacionarias, lo que obligaría a la Fed a acelerar su ritmo de ajuste monetario y tendría consecuencias sobre el mercado laboral.