PARÌS, Francia (EFE).- La ayuda global al desarrollo va a incrementarse este año un 4 %, hasta 105.900 millones de dólares, con subidas particularmente significativas en el África subsahariana y en Europa, pero en los tres próximos años las cifras bajarán, en particular las destinadas a países más pobres.
Estas son algunas de las conclusiones del informe de perspectivas sobre la ayuda al desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que calcula de que la caída será del 4 % entre 2014 y 2017 para los países menos desarrollados.
En 2013, la progresión de las aportaciones fue del 9 % respecto al ejercicio precedente, a 101.800 millones de euros, sobre todo por el dinero inyectado por las instituciones multilaterales y por Estados que no pertenecen al Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD) de la OCDE.
De hecho, los integrantes del CAD disminuyeron sus envíos el pasado ejercicio en un 1 %, a 64.500 millones de dólares, algo que se compensó con la duplicación de las ayudas de otros países y del alza del 17 % de los programas multilaterales.
En 2014, la subida prevista beneficiará sobre todo al África subsahariana, que recibirá 40.900 millones de dólares, tras los 38.500 millones del ejercicio precedente.
Sin embargo, las proyecciones para los años siguientes apuntan a descensos continuos en esa región, hasta 38.000 millones de dólares en 2017.
África en conjunto absorberá 47.600 millones de dólares en 2014 (tras los 47.100 millones en 2013) y el volumen se reducirá a 44.800 millones en 2017.
Las aportaciones dirigidas al continente americano experimentaron un descenso del 7 %, a 7.800 millones de dólares en 2013, debido a la amputación de fondos de las instituciones de la Unión Europea, de EEUU y de algunos otros donantes, como Japón o España, pero también a que en los tres años anteriores se habían registrado altos niveles de créditos de Francia para infraestructuras para Brasil.
Este año la OCDE aventura un nuevo descenso del 2 %, a unos 7.600 millones de dólares, mientras que en los tres años siguientes el volumen permanecerá básicamente estancado en 7.700 millones.