SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Cerca del 90% de la oferta culinaria de peces y mariscos de los complejos hoteleros se importa de países tan cercanos como Cuba o tan lejanos como China, pese al gran potencial pesquero que subyace en las costas dominicanas.
Se trata de un mercado que mueve anualmente 110 millones de dólares, y del que pescadores y acuicultores criollos han estado al margen debido a la falta de infraestructuras, capacitación y, sobre todo, apoyo del Estado.
“Ese potencial ahora se aprovecha al mínimo, porque solamente tenemos una pesca semi industrial en Puerto Plata, y la pesca artesanal, pero con la plataforma insular que tenemos hay mucho por explotar”, afirma Eusebio Melo, de la Federación Nacional de Trabajadores de la Pesca y Marinos Mercantes.
Mediante el decreto 40-13, de marzo pasado, el presidente Danilo Medina declaró “de alta prioridad” el desarrollo sostenible de la pesca y la acuicultura, y creó un fondo para el desarrollo del sector, que gestiona el Consejo Dominicano de Pesca y Acuicultura (Codopesca).
Melo manifiesta su esperanza de que la iniciativa marque un antes y después en el marco regulatorio y la competitividad del sector. “Estamos coordinando para mejorar el rendimiento y la calidad que requieren los hoteles, porque el 90% de la oferta turística es importada, hay empresarios sacando cientos de millones de la importación de pescados de tercera, aquí no ha habido una regulación de la pesca”, explicó.
Para aumentar su rendimiento y poder suplir a los hoteles del Este, los pescadores necesitan de antemano empacadoras y “que se ponga a funcionar el centro experimental de Samaná” que ahora administra el Codopesca, indicó el directivo de la Federación, que tiene más de cinco mil miembros.
Otra propuesta del sector es que el Estado financie la instalación de un “cadena de frigoríficos” o cuartos fríos en las 17 provincias costeras del país, para el almacenamiento y conservación de los productos marítimos, pero especialmente en la región Nordeste, donde se desarrollan el 40% de las actividades pesqueras.
Melo asegura que con este apoyo los pescadores del Este pueden venderle a los hoteles de Samaná, Las Galeras y Las Terrenas grandes volúmenes de “chillo, calamar gigante, dorado, carite, colirubia, mero, capitán, además de langosta, camarones, lambí, pulpo”, entre otras especies.
Cuba, Taiwán, México, China y Bangladesh son algunos de los países que suplen a la llamada industria sin chimeneas de República Dominicana, dijo el pescador a Acento.com.do.
Gestiones con Asonahores y el Grupo Punta Cana
Milton Ginebra, director ejecutivo del Codopesca, informó que ese organismo llevará a cabo encuentros con la Asociación Nacional de Hoteles, Restaurantes y Turismo (Asonahores), empresarios y asociaciones pesqueras, en procura de ampliar el mercado de la pesca local.
“Vamos a tener una próximamente una reunión con Asonahores para trabajar una nueva política, y también con el Grupo Punta Cana, para que de común acuerdo podamos promover la pesca sostenida y de no agresión al medioambiente”, dijo.
Agregó que para incentivar un mayor consumo del pescado y los demás alimentos marinos en la población se implementa también una campaña publicitaria.
Con esta estrategia el Gobierno procura “potencializar” los proyectos acuícolas y propiciar un incremento cercano al 40% en la producción acuícola para el próximo año, dijo el funcionario en la inauguración del “Programa sobre políticas de integración de la pesca y la acuicultura”.
Adelantó que uno de los proyectos tiene por objetivo aumentar la producción y comercialización de la tilapia, que en estos momentos se está importando.