Tsipras se dirige a Bruselas en busca de acuerdo con el apoyo de la oposición

Atenas, 7 jul (EFE/Gerard de Josep).- Grecia mira hoy hacia Bruselas, donde el primer ministro, Alexis Tsipras, buscará reiniciar las negociaciones con los acreedores, esta vez con el apoyo de todos los líderes de la oposición proeuropea.

El primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras, intervendrá mañana en el debate sobre la crisis griega que se celebrará en la Eurocámara para explicar a los eurodiputados su posición en las negociaciones con las instituciones acreedoras.

El presidente del Parlamento Europeo (PE), Martin Schulz, trasladó ayer lunes su invitación formal a Tsipras, que ha contestado hoy.

Alexis Tsipras, primer ministro de Grecia
Alexis Tsipras, primer ministro de Grecia

 

El presidente de los Griegos Independientes y socio de Gobierno, Panos Kamenos, aseguró hoy que "es la primera vez que el pueblo griego va a Bruselas con unidad nacional, a pedir una vez más una solución que lleve el país al crecimiento, con un camino fijo que demuestre que en las democracias es el pueblo quien decide y no los centros de poder".

Tras una primera ronda frenética de conversaciones este lunes entre Tsipras y los demás líderes internacionales, Grecia afronta hoy dos reuniones cruciales, una del Eurogrupo y una cumbre con los jefes de Estado y de Gobierno de los países de la eurozona.

La victoria del "no" en el referéndum del pasado domingo, además de la hoja de ruta firmada con los demás partidos del país, a excepción de los comunistas y los neonazis, deberían dar fuerza al equipo de Tsipras para negociar.

Pero los mensajes que se han recibido desde la otra parte no dan a entender por ahora que haya cambiado mucho el ambiente hostil hacia el Ejecutivo griego.

Según fuentes comunitarias citadas por el diario "Kathimerini", 16 de los 18 países de la eurozona estarían a favor de dejar salir a Grecia de la unión monetaria.

Uno de los dos únicos países amigos podría ser Francia, a juzgar por las palabras de hoy a la emisora de radio "RTL" de su primer ministro, Manuel Valls, quien afirmó que Europa no puede asumir el riesgo de una salida de Grecia de la moneda única por razones económicas, pero sobre todo por razones políticas.

El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, calificó este escenario como una cuestión de "egos", que deberían dejarse a un lado para poder evitar el "grexit".

Pero en las calles de un barrio céntrico de Atenas, la euforia del resultado del domingo se ha convertido en un aire de fatalismo, a la espera de una "venganza" de los socios, al haber mandado un mensaje contrario a lo que esperaban.

"Habrá un acuerdo, pero no hará que mejore la situación de la gente. Tanto en dracmas como en euros, el problema es el sistema, que hace más ricos a los ricos y más pobres a los pobres", dice Kuluris, un comerciante de unos 60 años.

En la hoja de ruta para negociar con los acreedores, que publicaron conjuntamente los partidos griegos proeuropeos este lunes, se pide un acuerdo que satisfaga la financiación del país con reformas basadas en un criterio fiscal de redistribución justo, que fomenten el crecimiento y eviten la recesión, y el compromiso de un debate sobre la sostenibilidad de la deuda.

Según la prensa local, la oferta que podría presentar Grecia a los socios se acercaría a la publicada por la Comisión Europea después de que se hubiera convocado el referéndum, que, según el Gobierno de Atenas, no había estado nunca formalmente sobre la mesa de negociaciones.

María, trabajadora del sector privado y madre de una niña de ocho años, considera que lo único que conseguirá Grecia es "un acuerdo que nos castigue todavía más".

En medio de un corralito, que se extenderá al menos hasta el próximo jueves, la situación financiera de Grecia se encuentra en un momento delicado, quedándose sin efectivo y dependiendo por completo del Banco Central Europeo (BCE) como si se tratara de un paciente intubado.

Así, la entidad con sede en Fráncfort decidió este lunes mantener la cantidad de liquidez de emergencia máxima que los bancos griegos pueden pedir al Banco de Grecia en 89.000 millones de euros, pero a su vez aclaró que les dará menos dinero por cada activo que presenten como garantía.

Con esto el BCE evita que la banca helena quiebre definitivamente, pero incrementa la presión al Gobierno de Atenas para que llegue a un acuerdo con sus socios europeos.

El Gobierno confía en que si la cumbre de hoy en Bruselas envía algún mensaje positivo que apunte a la reapertura de las negociaciones entre Grecia y sus acreedores, el BCE podría volver a abrir el grifo de las inyecciones de liquidez, lo que evitaría el colapso definitivo de la banca.

A pesar de la incertidumbre, los mercados financieros siguen reaccionando con relativa calma a los acontecimientos en Grecia, como revelaron ayer ante el resultado del referéndum del domingo.

En la eurozona las evaluaciones también han comenzado a nivel técnico, en el seno del llamado Grupo de Trabajo del Euro, así como en el consejo de gobierno del BCE, y a escala bilateral entre la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Francois Hollande, que mantuvieron una cena de trabajo el lunes en París. EFE

La economía griega empieza a sufrir los efectos del control de capitales

Atenas, 7 jul (EFE/Yannis Chryssoverghis).- El corralito impuesto en Grecia hace nueve días está empezando a hacer mella en la economía de este país, no tanto por las incomodidades cotidianas que impone el hecho de tener que esperar en fila ante un cajero automático como por los problemas en el funcionamiento de la industria y en el sector importador.

"Hay un descenso en las reservas de entre un 30 y un 35 %", aunque "de momento no hay cancelaciones y el control de capitales no ha influido negativamente en la impresión que tienen los turistas de Grecia", dijo a Efe Xenofón Petrópulos, de la Asociación de Empresas Turísticas Griegas (SETE).

De momento, los hoteles no tienen problemas de abastecimiento según Petrópulos y "seguirán funcionando sin problemas con los bancos cerrados en los próximos 10 ó 15 días".

Petrópulos admitió, sin embargo, que si continua el cierre de los bancos "habrá escasez de billetes en el mercado", lo que afectaría al pago a los proveedores de "alimentos perecederos, que de costumbre se hace en efectivo".

"El mercado hace frente a dificultades enormes", dijo a Efe Nikos Yeorgokostas, responsable de datos estadísticos de la Confederación Nacional de Comercio y Empresas (ESEE).

Yeorgokostas recalcó que en los primeros días del corralito "el comercio minorista, con excepción de los alimentos y del gasóleo, se ha hundido en hasta un 70 %", mientras "el volumen de negocios de las tiendas de alimentos y de las gasolineras aumentó en un 20 %".

"Estas dos tendencias se acentúan, aunque de momento no tenemos datos más detallados", precisó Yeorgockostas.

El responsable de ESEE se quejó además de que "los trámites de pago de proveedores al extranjero duran demasiado tiempo", lo que pone en peligro "comandas de productos sensibles bloqueados en las aduanas".

"El control de capitales, afectó a todo, al pago de personal, a la producción y la distribución de los productos", explicó por su parte Nikos Arjondís, director en la Asociación Panhelénica de Exportadores (PSE).

Un ejemplo palpable de los problemas prácticos que está causando el corralito lo da la situación en la industria avícola, donde si bien no hay escasez de animales ni de huevos, sí empieza a escasear el material de empaquetado, es decir las cajas para guardar los huevos y las bandejas para los pollos, productos que se importan de Bulgaria y Turquía.

Según relató a Efe Kostas Vardakis, propietario de un supermercado en la costa griega, los grandes productores exigen a sus clientes que los pedidos se efectúen con solo 48 horas de antelación, no se aceptan ya devoluciones y se les advierte que los precios pueden experimentar alzas súbitas en caso de escasez de material de empaquetado.

"El drama", explicó Vardakis, "es que aun habiendo los productos alimentarios en si, puede llegar el momento en que no se puedan aprovechar por falta de envoltorios".

Según el decreto ley publicado la pasada medianoche en sustitución del que entró en vigor el lunes de la semana pasada, las restricciones continuarán siendo las mismas en los próximos dos días.

Esto significa que, además de las limitaciones a la retirada de efectivo, se mantiene la prohibición de todas las transacciones de dinero al extranjero con excepción de los pagos para las importaciones de productos de primera necesidad.

En el Banco de Grecia se ha creado una comisión especial que examina una a una las solicitudes para transacciones comerciales que tienen que ver con el extranjero, dando hasta ahora prioridad a todo lo relacionado con el mercado farmacéutico, lo que ha llevado a retrasos en el resto.

El director de la asociación de exportadores celebró la decisión del Gobierno de aceptar de cara a un posible próximo decreto las propuestas de los exportadores de "dar prioridad a los trámites para las comandas al extranjero de productos sensibles y de materias primas para la industria".

Según Arjondís, a la luz de la experiencia del corralito chipriota, en 2013, "podemos esperar una reducción de hasta un 7 % de las exportaciones y de hasta un 28 % de las importaciones", lo que se traduciría en pérdidas semanales de 80 millones de euros para las exportaciones y de 600 millones de euros para las importaciones. EFE

Alexis Tsipras
Alexis Tsipras

Dejar entrar a Grecia en el euro fue "muy ingenuo", dice vicecanciller alemán

Berlín, 7 jul (EFE).- El vicecanciller y titular de Economía de Alemania, Sigmar Gabriel, reconoce en una entrevista publicada hoy en el semanario "Stern" que fue "muy ingenuo" dejar entrar a Grecia en la eurozona en 2001.

"Desde la perspectiva actual, la admisión de Grecia en el euro se llevó a cabo de manera muy ingenua", declara Gabriel, "pero peor todavía es que todos han estado mirando demasiado tiempo" cómo el país se sumía cada vez más en la crisis, agrega.

El ministro resume la lección que hay que extraer de la crisis griega con la afirmación de "nunca más apartar la vista cuando un país no cumpla con las reglas del juego en Europa".

En este sentido, Gabriel no se refiere sólo a cuestiones económicas y subraya que tampoco hay que apartar la vista "cuando en Hungría se pervierten las reglas del juego democráticas de Europa o si en estados de la UE pueblos como el gitano sufren tal discriminación que no les queda otra opción que huir".

Al mismo tiempo, el presidente de los socialdemócratas alemanes indica que podría plantearse la posibilidad de una quita para Grecia si el Gobierno en Atenas mostrara la correspondiente disposición a llevar a cabo reformas.

"Si ahora nos dedicamos a anular deuda sin que en Grecia haya cosas que cambien de forma radical, no se habrá conseguido nada", señala el ministro y puntualiza que "sólo se podrá hablar de la posibilidad de reducir la deuda si el Gobierno griego demuestra por su parte que lleva a cabo reformas".

De lo contrario, "el día después de la quita, las deudas volverían a aumentar de inmediato", argumenta.

Aún así, se muestra convencido en la entrevista de que al final se encontrará una salida a la crisis.

En este sentido afirma también en un videoblog publicado hoy en la página web del Partido Socialdemócrata (SPD) que "se trata de proponer lo correcto", es decir, "no sólo ahorrar, sino también invertir en el país".

En sus declaraciones al "Stern", Gabriel vuelve a criticar duramente al primer ministro griego, Alexis Tsipras, del que dice que ha intentado "poner patas arriba toda la eurozona" sin tener en cuenta el efecto que esto tiene sobre su propio pueblo.

Al mismo tiempo, aboga por lanzar un programa para ayudar al pueblo griego en vista de la grave situación social que conllevaría la quiebra del país y agrega que no se le puede hacer responsable "de las estupideces de su gobierno".

En la misma línea se expresa en su videoblog, donde señala que "Europa no puede dejar ahora en la estacada a la gente en Grecia" y añade que "por mucho que uno pueda enfadarse con el Gobierno griego, la gente no debe sufrir las consecuencias".

En el mismo mensaje expresa su esperanza de que Atenas vuelva a la mesa de negociaciones y afirma que "el debate necesita un nuevo comienzo".

Por otra parte, dice no temer consecuencias económicas para Alemania y asegura que "la eurozona es fuerte y estable".

"Actuamos no por que estemos preocupados por nosotros mismos, sino por que nos tenemos que preocupar por Europa", precisó.

Grecia es "importante", señaló, pero las eternas negociaciones absorben demasiado esfuerzo respecto a otros asuntos, como Ucrania o el drama de los refugiados. EFE