SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Representantes del sector ganadero y de organizaciones vinculadas a la producción nacional y a los consumidores declararon “de emergencia” el tema de la aplicación estricta de la norma del etiquetado, a partir del primero de enero de 2017.

En esa fecha entrará en vigencia el que todos los productos alimenticios de producción nacional e importada deberán contar en sus etiquetas el registro sanitario vigente, así como entrar al país en idioma español.

En un encuentro celebrado en la sede de la Asociación Dominicana de Productores de Leche (Aproleche), en la Ciudad Ganadera, se anunció la convocatoria de encuentros con productores locales de lácteos y federaciones de ganaderos en distintas zonas del país, en un esfuerzo para motivar que se agilicen los procesos para la entrada definitiva del etiquetado.

Otras decisión adoptada en la Jornada de Evaluación sobre la Aplicación del Etiquetado en Productos Lácteos en RD es el inicio de una campaña de sensibilización a través de medios informativos. Igualmente, que haya una mayor correlación entre los sectores público y privado, con miras a lograr que se materialicen los cumplimientos estipulados.

Aproleche y sus distintas federaciones solicitaron a las autoridades que ordene a la Dirección General de Aduanas impedir la entrada al país de todos los productos lácteos etiquetados en idioma extranjero que no traigan colocada una etiqueta complementaria por su fabricante.

Asimismo, pidieron al Consejo Nacional para la Reglamentación y Fomento de la Industria Lechera (Conaleche) realizar una investigación sobre la práctica del etiquetado complementario, a fin de identificar posibles infractores.

De igual manera, solicitaron la realización de un estudio general de los avances y cumplimientos del etiquetado, antes de que termine el presente año, evaluando la composición de los productos.

Esfuerzo conjunto

Eric Rivero, presidente de Aproleche y de Confenagro, dijo que los productores tienen un compromiso entre todos de hacer las cosas que mejor convenga al país, “y esta decisión que ha asumido el Estado a través del presente gobierno es un anhelo importante de todos, desde hace 20 años”.

Destacó que el compromiso etiquetado solo lo puede asumir el mismo fabricante, al tiempo de señalar que los empresarios dominicanos deben dejar de lado la práctica de adquirir productos en los que definió como “cementerios” o almacenes de productos ya a punto de vencer o de pésima calidad que operan en países desarrollados.

En esa tónica también habló Julio Virgilio Brache, de la Asociación Dominicana de Industrias Lácteas (ADIL), quien dijo que en el país se está permitiendo la entrada de decenas de productos desde hace años sin siquiera estar sujetos a inspección.

Vertilia Cabrera, presidenta del Comité de Amas de Casas, y Luis Deschamps, directivo de la Asociación de Consumidores, coincidieron en que ha sido un grito de los consumidores que el etiquetado sea una realidad. “Hemos sido bombardeados desde el exterior con productos que allá son desechos”, dijo Cabrera.

Mientras, Deschamps dijo que los mercados están saturados de productos enlatados con leyendas que no se entienden.

Brache, también vicepresidente de Pasteurizadora Rica, consideró que lo del etiquetado es un esfuerzo conjunto, y que hay que estar en forma permanente revisando los establecimientos comerciales para que haya garantía en su aplicación.

“La única manera que tiene el país, los consumidores, de defender y lograr términos equitativos con los tratados comerciales que se han suscrito es haciendo respetar las leyes dominicanas, y las leyes que establecen los tratados internacionales”, dijo.