SANTO DOMINGO, República Dominicana.-“A mediados de octubre, un grupo de presuntos narcotraficantes se reunió en un club de la capital dominicana para brindar por un gran negocio: el envío inminente de más de 2,000 libras de cocaína”.

Así empieza el reportaje de Ezra Fieser, de El Nuevo Herald, de Miami, para describir toda la maraña de intereses  en torno a la concesión del Estado dominicano a la empresa ICSSI, SA, para instalar y operar equipos de rayos X en los puertos marítimos, y que es el centro polémicas y escándalos que envuelven al senador demócrata Bob Menéndez, al médico Salomón Melgen y al abogado Vinicio Castillo Semán (Vinicito), hijo de Marino Vinicio Castillo Rodríguez, director de Ética e Integridad del Gobierno dominicano.

Según Ezra Fieser, cuando las drogas llegaron unos días más tarde, en lancha rápida desde América del Sur, fueron descargadas en una playa del suroeste de República Dominicana, y desde allí los hombres trataron presuntamente de llevar el envío a Santo Domingo, donde planeaban cargarlo en un contenedor y enviarlo a Europa a través del puerto más activo del país.

Agrega que la operación de narcotráfico fue frustrada, y que poco más de una semana después que los hombres celebraron la operación, estaban en la cárcel y el envío fue decomisado.

“La clave de la acción, que los funcionarios dominicanos calificaron como “un duro golpe al narcotráfico internacional”, fue un equipo de seguridad montado en el puerto, integrado por agentes antinarcóticos de Estados Unidos y República Dominicana”, detalla el reportaje.

Explica que, meses antes, el equipo había confiscado 1,700 libras de cocaína de un contenedor con destino a los Países Bajos. La información que obtuvieron gracias a este decomiso puso a las autoridades tras la pista de los presuntos narcotraficantes.

“La seguridad en los puertos dominicanos está en el centro del escenario de un creciente escándalo que implica al senador Bob Menéndez y a su amigo y contribuyente Salomon Melgen, un oftalmólogo de la Florida con grandes conexiones políticas en República Dominicana”, sostiene el reportaje de El Nuevo Herald.

Subraya cómo las oficinas de Melgen en West Palm Beach fueron allanadas en enero como parte de una investigación independiente sobre sus facturaciones al Medicare, y el FBI está investigando su relación con Menéndez y los viajes que hicieron en el avión privado del médico a la República Dominicana.

“Los intereses empresariales de Melgen van más allá de la cirugía oftalmológica. El doctor posee una participación decisiva en ICSSI, SA, una compañía dominicana que tiene un contrato exclusivo con el gobierno dominicano para instalar máquinas de rayos X en los puertos para ayudar en la búsqueda de drogas y contrabando”, narra Ezra Fieser.

“La seguridad en los puertos dominicanos está en el centro del escenario de un creciente escándalo que implica al senador Bob Menéndez y a su amigo y contribuyente Salomon Melgen, un oftalmólogo de la Florida con grandes conexiones políticas en República Dominicana”

Resalta que las máquinas no han sido instaladas, ya que el contrato ha sido detenido por los tribunales a causa de lo que sus críticos consideran costos exorbitantes y “lenguaje anticompetitivo”.

Explica cómo Menéndez, un demócrata de Nueva Jersey, ha presionado a funcionarios de la administración de Obama para que a su vez presionen al gobierno dominicano para que cumpla con el contrato.

“Del mismo modo, los familiares dominicanos de Melgen, entre ellos un destacado abogado que es el zar de la lucha contra la droga en el país, han hablado públicamente sobre la necesidad de máquinas de rayos X en los puertos, vinculando esta necesidad a la seguridad nacional”, precisa.

El reportaje de El Nuevo Herald indica que las autoridades portuarias y expertos en seguridad dijeron a The Miami Herald que los escáneres de rayos X son herramientas a las que ellos darían la bienvenida.

Agrega que mientras el contrato para instalar las máquinas se demora en los tribunales, los puertos, con fuerte ayuda de las agencias estadounidenses, han intensificado su búsqueda de drogas utilizando medios alternativos.

El año pasado, el equipo de seguridad que opera en el mayor de los puertos, Multimodal Caucedo, ayudó a confiscar aproximadamente 4,600 libras de cocaína, o aproximadamente el 19 por ciento de toda la cocaína capturada en el país durante un año que sentó récord, según estadísticas de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), una dependencia militar.

Salomón Melgen y Bob MenéndezCita las palabras de Morten Johansen, director ejecutivo de DP World Caucedo, copropietaria del puerto privado: “Las máquinas de rayos X son herramientas que, según vemos, resultan útiles, además de las otras medidas de control que hemos puesto en marcha”.

Y agrega: “Lo que es más importante es la colaboración con las autoridades, tanto locales como de Estados Unidos, y que el puerto esté haciendo las inversiones adecuadas en materia de seguridad”.

El periodista Ezra Fieser resalta que la República Dominicana es un importante punto de transbordo en el Caribe para las drogas que van hacia el Norte desde América del Sur.

Señala que hasta hace pocos años, los traficantes de drogas bombardeaban la isla con fardos de cocaína lanzados desde aviones pequeños, pero que ahora, están cambiando de táctica.

“Ahora que República Dominicana ha eliminado en lo esencial el tráfico de drogas por vía aérea, estamos viendo un aumento en las actividades de narcotráfico en los puertos dominicanos”, indicó Daniel L. Foote, subjefe de la misión de la embajada de EEUU, en una reunión con la Asociación Dominicana de Cargas, según una transcripción de sus comentarios. “Estamos en el proceso de hablar con las autoridades dominicanas sobre la posibilidad de una mayor presencia [de EEUU]”.

Dentro de las posibilidades, según explicó, está el entrenamiento de más perros detectores de drogas para los puertos.

Ezra Fieser indica que aunque son importantes, las máquinas de rayos X no parecen ser tan integrales para el control del tráfico de drogas como los partidarios de Melgen han sugerido.

“El primo de Melgen, el abogado Vinicio (Vinicito) Castillo, las calificó como una “cuestión de seguridad nacional para Estados Unidos y nuestro país”, en una conferencia de prensa realizada el lunes”, precisa el reportaje.

“Cinco millones de contenedores pasan por los puertos, y menos de 5 por ciento son sometidos a los rayos X”, dijo. “Y la única máquina … sólo es capaz de escanear contenedores vacíos”, ha argumentado Vinicito Castillo.

El reportaje subraya que, de hecho, de acuerdo con las autoridades portuarias, menos de 1.5 millones de contenedores pasan a través de los puertos cada año. Y la máquina —donada en el 2006 por el gobierno de EEUU— “sólo escanea los contenedores llenos”, afirmó Johansen. Los contenedores vacíos son inspeccionados por otros medios.

“Con esta máquina, los puertos dominicanos ya han examinado aproximadamente el mismo porcentaje de contenedores que otros puertos de la región”, explica el periodista.

Agrega que todos los contenedores que entran y salen en Multimodal Caucedo también son revisados en busca de materiales radiactivos con detectores donados por el Departamento de Energía de EEUU bajo la Iniciativa Megapuertos.

Explica que el puerto, que fue construido de manera privada en una lengua de tierra frente al mar, a unos 40 minutos al este de la capital, opera alrededor de 1.2 millones de contenedores al año.

Indica que cada día, unos 700 camiones entran en el recinto fuertemente controlado para recoger y dejar los contenedores.

Dentro de un edificio de la administración junto a la entrada, militares dominicanos y agentes de la aduana de EEUU realizan labores de inteligencia y revisan los manifiestos de los cargamentos entrantes en busca de señales de alerta.

“Trabajamos muy estrechamente con [Aduanas y Control de Fronteras], la DEA e Inmigración de EEUU a través de nuestras agencias nacionales”, dijo un funcionario de seguridad portuaria que trabaja en el equipo. “Hay una gran cantidad de intercambio de información, en ambas direcciones, con otros países. Eso es lo más importante”, cita el reportaje.

Detalla que si un contenedor es señalado para su revisión el cargamento se envía a la máquina de rayos X, una sencilla estructura rectangular de metal azul adosada a un remolque pequeño.

“Mientras el contenedor pasa a través de la máquina, una imagen de su contenido se transmite a los monitores que hay en el interior del remolque. Un agente de seguridad, a continuación, compara las imágenes con el manifiesto del embarque”, narra.

A seguidas explica que si la imagen y el manifiesto no coinciden, el contenedor es abierto e inspeccionado manualmente, dijeron los funcionarios de seguridad.

“El año pasado, descubrieron drogas en bolsas ocultas en el interior de cajas de cerveza en un cargamento enviado desde México a Montreal, encima de barriles metálicos de zumo de piña con destino a Puerto Rico, y en un cargamento de zapatos, entre otros escondites”, sostiene.

“Actualmente, no se cobra cuando un contenedor es escaneado”, afirmó Johansen.

En contraste con lo que ocurre en la actualidad, ICSSI podría cobrar casi $100 por contenedor. “Las estimaciones han fijado el valor a 20 años del contrato entre $500 millones y $1,000 millones. Los funcionarios dominicanos se han echado atrás ante el costo del contrato y el hecho de que da a ICSSI un monopolio. Llamadas a los números de teléfono que aparecen a nombre de la oficina de ICSSI en Santo Domingo no fueron devueltas”, explica el reportaje de El Nuevo Herald.

“El contrato de exclusividad parece haber perjudicado a los puertos dominicanos. EEUU estaba dispuesto a donar una máquina de rayos X al puerto de Haina, el segundo más activo del país”, dijo un funcionario de la empresa a The Miami Herald, citado en el reportaje de El Nuevo Herald.

“Esta afirmación se comprobó en una investigación de la revista dominicana La Lupa Sin Trabas, que informó inicialmente sobre la participación de Melgen en el contrato del puerto. Un funcionario del Departamento de Estado, sin embargo, dijo que no podía hacer comentarios, debido a que el Comité de Etica del Senado está investigando el caso”, sostiene el reportaje.

Recuerda que los funcionarios del puerto dijeron que también existen preocupación acerca de quién operaría las máquinas.

“Apoyamos plenamente el uso de los escáneres”, aseguró Johansen. “Pero tiene que hacerse con la tecnología adecuada, de la manera correcta, con la debida consideración hacia las actividades empresariales, y bajo la autoridad de la aduana dominicana, que es el organismo apropiado”, expone el reportaje.

Recuerda que el acuerdo sobre el puerto y la participación de Menéndez surgieron después que The Daily Caller, un sitio conservador de noticias en internet, publicó alegaciones de que Menéndez, Melgen y Castillo habían contratado a prostitutas para celebrar fiestas en la residencia de vacaciones que posee Melgen en República Dominicana.

“El fiscal de distrito de la oficina de Santo Domingo ha abierto una investigación para encontrar la fuente de las denuncias, que se originaron con un hombre que usa una cuenta de correo electrónico con el nombre de “Peter Williams”, precisa.

Indica que Castillo, quien solicitó la investigación, dijo a los periodistas que la dirección del IP (proveedor de internet) de esa cuenta había sido rastreada hasta México, pero una portavoz de la oficina, Mónica Peña, dijo que la investigación estaba a punto de ponerse en marcha, y que la afirmación no había sido verificada.

“La investigación seguirá el mismo camino que las demás”, declaró.