Washington, 4 abr (EFE).- EEUU redujo su déficit comercial en febrero en casi un 10 %, hasta los 43.600 millones de dólares, gracias a un repunte en las exportaciones, que registraron su mejor mes desde finales de 2014, y el saldo negativo con China cayó más de un 26 % con respecto a enero, informó hoy el Gobierno.
El déficit comercial de Estados Unidos disminuyó en febrero un 9,6 % y se situó en 43.600 millones de dólares, tras haber alcanzado en enero su mayor nivel en casi cinco años.
Así, el saldo comercial negativo de febrero fue inferior a los pronósticos de los analistas, que anticipaban un déficit mayor, de alrededor de 44.500 millones de dólares tras la cifra revisada de 48.200 millones de enero.
En febrero, las exportaciones estadounidenses crecieron un 0,2 % y sumaron 192.900 millones de dólares, el mejor dato desde diciembre de 2014, mientras que las importaciones se redujeron un 1,8 %, hasta los 236.400 millones, según el informe del Departamento de Comercio.
El leve aumento de las exportaciones vino de la mano de más envíos al exterior de bienes de consumo como automóviles y de materiales y suministros industriales.
Mientras, el descenso de las importaciones se debió a que EEUU compró en febrero menos teléfonos celulares de países asiáticos y menos vehículos de Europa.
Pese a la caída de febrero, el déficit comercial acumulado en los dos primeros meses del año fue un 3,1 % superior al del mismo periodo de 2016.
Por países, el saldo negativo en el comercio de EEUU con China cayó en febrero un 26,6 %, hasta los 23.000 millones de dólares desde los 31.300 millones del mes anterior.
El presidente de EEUU, Donald Trump, criticó duramente a China durante su campaña electoral porque considera que ese país promueve prácticas comerciales injustas y este jueves recibirá en su mansión de Mar-a-Lago (Florida) al mandatario chino, Xi Jinping, para hablar de ese asunto y otros.
El propio Trump ha augurado un encuentro "muy difícil" con Xi, al insistir en que EEUU no se puede permitir "tener un déficit comercial masivo" con China y "pérdida de empleos".
La semana pasada, Trump firmó dos ordenes ejecutivas que tienen como objetivo frenar las "violaciones" en las prácticas comerciales y dar con los "tramposos" que, en su opinión, han provocado la pérdida de millones de trabajos manufactureros en EEUU.
Esas órdenes "mandan un mensaje alto y claro, y ponen las bases para la gran revitalización de la industria manufacturera estadounidense", aseguró Trump en una comparecencia en la Casa Blanca.
Uno de esos decretos da 90 días al Departamento de Comercio para revisar prácticas comerciales "abusivas" de países que perjudican a Estados Unidos.
Una vez identificados esos países, Trump promete tomar un conjunto de medidas "legítimas y adecuadas" que resuelvan esos desequilibrios.
Mientras, el otro decreto obligará a pagar las tasas correspondientes a los "tramposos" importadores extranjeros, en palabras de Trump, que establecen precios por debajo del coste para atacar a los competidores estadounidenses en el mercado interno.
Por otro lado, Trump quiere renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), firmado por EEUU, México y Canadá en 1994, y piensa dar los primeros pasos legales al respecto este mismo mes, antes del receso legislativo de abril, según adelantó la semana pasada su secretario de Comercio, Wilbur Ross.
El mandatario considera que el TLCAN es la causa de la pérdida de una gran cantidad de empleos en EEUU, dado que ha permitido el traslado de fábricas a México para ahorrar costes de producción.
Según el informe divulgado hoy, en febrero el déficit comercial de EEUU con México creció un 46 %, hasta los 5.800 millones de dólares, mientras que el saldo negativo con Canadá se redujo notablemente (un 38 %) y quedó en 2.100 millones. EFE