WASHINGTON, Estados Unidos (EFE).- El Congreso de EE.UU. aprobó la noche del viernes, 8 de abril, una resolución de última hora para prorrogar durante una semana los fondos del Gobierno federal, apenas una hora antes de que se cumpliera el plazo que habría paralizado la Administración por primera vez en 15 años.

El presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, anunció un acuerdo que aplazará los fondos actuales para financiar las actividades de las agencias federales hasta el próximo jueves a medianoche, cuando ambos partidos esperan haber aprobado un presupuesto para el resto del año fiscal 2011.

El pacto autoriza una nueva prórroga de los fondos del año fiscal anterior para dar tiempo al Congreso de redactar y votar, la próxima semana, una medida que cubra los seis meses que restan de este ejercicio.

No obstante, ya existe un acuerdo sobre el paquete de recortes al presupuesto federal de 2011, que serán de 38.500 millones de dólares, según fuentes legislativas.

El acuerdo temporal que entra en vigor esta medianoche hace efectivo al instante un primer recorte de 2.000 millones de dólares, según confirmó el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid.

Tras intensas negociaciones y recriminaciones mutuas, los legisladores también lograron eliminar de la resolución de gastos varias cláusulas controvertidas relacionadas con el presupuesto para los centros de planificación familiar de Planned Parenthood y con la Agencia de Protección Ambiental, según un bosquejo del acuerdo.

Boehner fue el encargado de anunciar el acuerdo ante los medios minutos antes de las 23.00 hora local del viernes (03.00 GMT del sábado), después de una reunión de más de una hora con los republicanos de la Cámara baja para tratar de resolver las últimas diferencias.

El pacto esquivó por una hora el cierre de las oficinas del Gobierno previsto para la medianoche del viernes, cuando vencía el plazo de la última prórroga del presupuesto anterior, lo que dejaba a la Administración sin dinero para financiar sus actividades y a cerca de 800.000 funcionarios federales en el dique seco.

Aunque los legisladores lograron con este acuerdo conjurar el primer cierre del Gobierno en 15 años, retomarán la batalla la próxima semana, cuando tengan que someter a votación el presupuesto definitivo para lo que resta del año fiscal 2011, que concluye el próximo 30 de septiembre. EFE