SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Economistas, dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), manifestaron su  oposición a que el Estado pase al sector privado la administración de las empresas distribuidoras de electricidad (EDES) ni las plantas de carbón que se van a instalar en Punta Catalina.

“Esto en razón de que ni la población ni el Estado dominicano deben seguir subsidiando la onerosa participación de los entes privados en el sector energético de la economía dominicana”, afirmaron los profesionales de la economía, integrantes del Foro Económico del PLD.

En un escrito publicado este lunes bajo el título “Rechazan propuesta privatizadora. Economistas del PLD recomiendan medidas para un sistema energético fiable y eficiente” los economistas presentan recomendaciones a considerar en el Pacto Electrico.

En la agenda semanal del Foro Económico del PLD, como se ha denominado el equipo consultivo en materia económica, se hizo una evaluación con relación al Pacto Eléctrico y los pasos que viene dando el gobierno central en esa dirección.

“Celebramos el hecho de que el Gobierno dominicano esté llevando a cabo un proceso de diálogo con miras a definir el pacto eléctrico y así cumplir con uno de los mandatos de la ley que establece la Estrategia Nacional de Desarrollo”, señalaron los integrantes de Foro, que es coordinado  por el economista y dirigente nacional del PLD, Víctor Manuel Peña.

“No procede por no ser viable, puesto que no es rentable socialmente hablando, privatizar o transferir al sector privado ni las EDES ni las plantas a carbón que se van a instalar en Punta Catalina, Baní. Esto en razón de que ni la población ni el Estado dominicano deben seguir subsidiando la onerosa participación de los entes privados en el sector energético de la economía dominicana”, es el punto siete de las recomendaciones de los economistas peledeístas, que adelantaron depositarán ante la coordinación de la discusión del Pacto Eléctrico.

En la recomendación final resaltaron que el pacto eléctrico tiene que traducirse en aumentar   la cantidad y la calidad de la energía producida y servida, en el abaratamiento del costo de la misma y en la diversificación permanente de la matriz energética sobre la base darles una mayor participación a las fuentes alternativas con pocos o reducidos efectos contaminantes sobre el medio ambiente.