SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Enrique Ramírez, titular de la Dirección General de Aduanas, dijo en un encuentro con los miembros de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) que la entidad a su cargo es consciente de su rol en defensa del productor nacional y de la justa competencia.

“​Seguiremos trabajando para ser un ente facilitador del comercio, sin perder de vista nuestro papel como defensor de los sectores productivos nacionales y de la justa competencia, ahora más con las herramientas que nos da la Ley 17-19 para la erradicación del comercio ilícito, contrabando y falsificación de productos regulados", indicó Ramírez en una actividad de la AIRD con el tema “Rol de las Aduanas en Defensa Comercial de los Sectores Productivos”.

Afirmó que las aduanas constituyen la primera línea de defensa comercial, dado que puede resultar dilatado el proceso mediante el cual puede intervenir el organismo al que corresponde, por ley, actuar, que es la Comisión Reguladora de Prácticas Desleales en el Comercio y Medidas de Salvaguarda, para apegarse a lo establecido legalmente.

Afirmó que los delitos aduaneros son infracciones a la legislación de Aduanas que buscan evadir el pago de impuestos, burlar controles o determinadas prohibiciones y limitaciones, introducir dinero o títulos de valores al portador que, en su mayoría, provienen de actividades ilícitas.

Entre los delitos citó el contrabando, el fraude en la valoración e infravaloración, el falso origen, clasificación o designación arancelaria falsa, aplicación fraudulenta de contingentes arancelarios, uso indebido de los regímenes aduaneros especiales, uso irregular del tránsito internacional.

Aseguró que, en el caso de República Dominicana, los fraudes aduaneros más dañinos son el contrabando, la subvaluación, infravaloración y sobrevaluación, seguido por la triangulación o falso origen de las mercancías, así como el mal uso de los regímenes aduaneros, de manera particular los suspensivos o liberatorios del pago de tributos.

La lucha y resultados frente al contrabando, particularmente y a modo de ejemplo, los cigarrillos, muestran de qué manera ha podido la aduana intervenir en defensa del comercio legal y los sectores productivos nacionales.

“La defensa comercial debe ser una tarea de todos; por eso en Aduanas impulsamos la certificación Operador Económico Autorizado (OEA), porque constituye una herramienta útil y de soporte al comprometer las empresas certificadas a convertirse en socios confiables”, expresó Ramírez.

DOCUMENTO DE LA DIRECCIÓN GENERAL DE ADUANDAS:  201907-17 Defensa comercial- REV -ERA-vf

El presidente de la AIRD, Celso Juan Marranzini, sostuvo a su vez que, efectivamente, la instancia aduanera constituye “un socio clave para el fortalecimiento del sector, el incremento de las exportaciones, el cuidado de la libre y leal competencia y hasta de la equidad fiscal”.

Las aduanas cumplen un servicio público “no solo como facilitador, también con las funciones de vigilar y fiscalizar el paso de mercancías por las costas, fronteras y aeropuertos del país, la determinación de la recaudación de impuestos a la importación, la agilización de las exportaciones, la generación de las estadísticas de ese flujo de comercio, entre otros, todo esto sin perjuicio de las demás funciones que le encomiende la Ley”, recordó.

Marranzini aseguró que “las relaciones de la AIRD con aduanas se han caracterizado por la apertura, el diálogo franco, el intercambio de conocimientos, de información y la cooperación”.

Expresó que, como isla, “la agilidad en el proceso de desaduanizar nuestras importaciones es vital, debemos mantener inventarios mayores que aquellos competidores establecidos en continentes y esto impacta en nuestros costos de forma negativa cuando por cualquier razón hay atrasos en recibir nuestras materias primas”.

Indicó que, en ese sentido, han encontrado en la Dirección de Aduanas “un socio que busca hacer procesos más rápidos y eficientes”.

También destacó el rol fundamental de las aduanas en la lucha contra los ilícitos “que ocasionan una situación difícil a diversos subsectores industriales, los cuales han visto mermar considerablemente sus niveles de venta y competitividad y además impactan negativamente la capacidad recaudatoria del Estado y crean distorsiones serias en el mercado”.