Brasilia, Brasil (EFE).- La Cámara de Diputados de Brasil aprobó el proyecto de ley que autoriza el uso de aplicaciones de transporte urbano como Uber y Cabify, entre otras, pero delegó su legalización a los municipios, que deberán reglamentarlas tal como lo hacen con el servicio de taxis.
El texto, que fue aprobado este martes en votación simbólica y modifica otro que pretendía vetar el uso de ese tipo de plataformas para el transporte individual remunerado, deberá ser ahora remitido en el Senado y de ser ratificado en la Cámara alta seguirá para su sanción por parte del presidente, Michel Temer.
No obstante, si el proyecto sufre modificaciones en el Senado, el texto retornará nuevamente para su debate en la Cámara de Diputados.
El proyecto aprobado este martes en la Cámara baja retiró el estatus de "naturaleza privada" al servicio prestado por este tipo de aplicaciones y pasa a considerar como "público" el transporte ofrecido por las plataformas, una prerrogativa que debe ser reglamentada por los municipios.
En ciudades como Sao Paulo, la mayor del país y donde las aplicaciones están autorizadas, la reglamentación considera el servicio como "privado" y en el caso de que el actual proyecto sea ratificado por el Senado y sancionado por Temer se deberán modificar las normas.
El servicio en Sao Paulo tiene un número limitado de coches por cada aplicación y el municipio cobra una tarifa extra por kilómetro rodado.
Mientras los diputados votaban, Uber y 99 Taxi, una aplicación brasileña que ofrece el servicio de taxis y vehículos particulares, realizaron en las afueras del Congreso una manifestación con carteles en los que miles de usuarios, identificados con su foto, expresaban el apoyo a las plataformas.
Del otro lado en las afueras del Congreso, los taxistas de la capital brasileña se agruparon también para acompañar la votación y exigir pacíficamente más rigidez en la autorización de las aplicaciones que compiten con su servicio en todo el país. EFE