SANTO DOMINGO, República Dominicana.- A mayo del presente año, la deuda de las empresas distribuidoras de propiedad estatal con las generadoras eléctricas representó alrededor de 3.6% de la deuda pública y el 1.3% del Producto Interno Bruto (PIB) dominicano.
Del total de la deuda con este sector, que asciende actualmente a unos US$850 millones, el 63% tiene más de 61 días vencida, 11% entre 31 y 60 días, 13% menos de 30 días, 11% de factura no vencida y 2% congelada.
De acuerdo con la firma consultora ANALYTICA, la acumulación de la deuda se debe a la ineficiencia en el cobro por parte de las distribuidoras, “por lo que un mejor manejo administrativo podría detener la tendencia al alza” que se observa.
El mayor monto se le adeuda a EGE Haina, con un 40% del total. Esta deuda “posee una tendencia al alza y el 68% tiene más de 61 días vencida”, señala el reporte titulado "¿A quién le debe la CDEEE?", siglas de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).
En segundo lugar se encuentra la deuda con la empresa AES que representa un 31.5% del total, con la mitad del monto vencido hace más de 61 días, seguida de la generadora GSF con un 9.6% del total y un 98% de la deuda vencida hace más de 61 días. Después se encuentra Seaboard con un 7.3% del total y una tendencia hacia la baja.
Asimismo, la deuda con Laesa presenta una tendencia a la baja y posee un 5.5% del total, con la totalidad de su deuda vencida. “Luego se encuentra Palamara de La Vega, que contiene un 3% de la deuda a las generadoras y es la que tiene mayor proporción de factura no vencida con un 55%”.
Por último se encuentra Metaldom con un 1.6% del total y 84% de la deuda vencida hace más de 61 días.
ANALYTICA señala que una mayor efectividad en el cobro de las facturas eléctricas podría aliviar la deuda hacia este sector y evitar el financiamiento al que requieren las generadoras cuando tienen falta de liquidez.
Asimismo, sugiere que una opción a considerar es la emisión de títulos a corto plazo de parte del gobierno, para de esta forma conseguir menores tasas de interés que las generadoras y evitar la deuda hacia las mismas.
Estas medidas “son necesarias para mejorar la estructura de costos de estas empresas y elevar la competitividad en este sector”, sostiene.