SAN FRANCISCO DE MACORÌS, República Dominicana.- Al dar a conocer su diagnóstico en torno a la situación del país, el Consejo Regional de Desarrollo (CRD) exhortó al liderazgo social y político a “acoplarse a los nuevos tiempos, a fin de no quedarse rezagados” ante los “grandes cambios” que a juicio de la entidad experimenta la sociedad dominicana.

El organismo representativo de las provincias del Nordeste y el Cibao Central resaltó que actualmente “el país está sumergido en un proceso social y político, que le conduce inexorablemente a los grandes cambios y transformaciones que urgen y reclaman todos los componentes de la sociedad”.

Asimismo, la entidad, que tiene entre sus principales ejecutivos a Ysòcrates Andrés Peña y a Monseñor Jesús María de Jesùs Moya, consideró que “se está imponiendo una nueva forma de pensar, que está conduciendo a la población y a sus instituciones a un accionar, que impone a  nuestras entidades políticas y a sus liderazgos a cambiar de rumbos y a tener una correcta visión, para con ello asumir un mejor rol político y social”.

De acuerdo con la entidad, este proceso “camina sobre bases firmes, dados los sólidos niveles de preparación y de mayor conciencia social que se están logrando en todos nuestros estratos sociales, junto a los liderazgos emergentes que engendran las nuevas generaciones”.

“Hoy en día, en nuestra población más pobre como la de mayores recursos económicos, es palpable una firme convicción y un adecuado conocimiento de cómo debe generarse el progreso social, y además, sobre el cual es el mejor rumbo a seguir para lograr el desarrollo y para obtener reales soluciones a los diversos problemas que afectan nuestra nación”.

El CRD manifestó que “existe un accionar y vigilancia colectiva en la que participan en forma activa pobres y ricos, el campo y la ciudad, en procura de que no se fracase bajo ninguna circunstancia en las grandes y pequeñas iniciativas encaminadas a motorizar con eficacia al  progreso social y el real desarrollo”.

Instó a los diferentes sectores nacionales a “reafirmar sus tareas y responsabilidades, constituyéndose en motores y guías de una etapa y proceso histórico que nos enrumba hacia  nuevos horizontes”.