SAN PEDRO DE MACORÍS, República Dominicana.- El vicepresidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), José Guzmán, acusó al director de Patrimonio y Recuperación del Consejo Estatal del Azúcar (CEA), Rubén Calcagno, de repartir los bienes de esa corporación estatal.
Sostuvo que ese alegado reparto ilegal se lleva a cabo con la anuencia y complicidad del actual director Ejecutivo, José Domínguez Peña, a quin acusó de haberse apoderado de más de mil tareas de tierras cultivadas de caña pertenecientes al Ingenio Porvenir, ubicadas en el Batey Olivares del Municipio de San Pedro de Macorís.
Guzmán afirmó que funcionarios y amigos del director del CEA, entre ellos Ramón Quezada, Gregorio Paredes, han cercado unas 1,200 tareas en el referido lugar.
Destacó que esas tierras fueron arrendadas en septiembre del año 2010 a la empresa de capital español Azucarera Porvenir, cuyo contrato ha desconocido el actual director del CEA, al estar “repartiendolas y vendiéndols de forma ilegal a funcionarios y amigos en desconocimiento de un contrato".
Dijo que "lo mismo está ocurriendo con las tierras que pertenecieran al Ingenio Consuelo en el Batey Don Juan del Municipio de Consuelo”.
“Hay toda una política e intención pecaminosa firme del actual director Ejecutivo del Consejo Estatal del Azúcar de repartir y vender de forma oscura lo que queda de ese emporio propiedad del Pueblo Dominicano con fines de enriquecimiento ilícito. La venta de tierra no para aun siendo estas ilegales toda vez que la Ley 141/97 no contempla la venta de las mismas”, indicó.
Asimismo, aseveró que el Consejo Estatal del Azúcar ha sido “asaltado” por lo que calificó como una “guarida vulgar”, cuyo único propósito es aprovechar su paso en la administración del mismo para sacar provecho de ello.
Enfatizó a su vez que el director del CEA y administrador judicial provisional del Ingenio Porvenir, no tiene forma de explicar el uso dado a más de 850 millones de pesos por concepto de los ingresos generados de la venta de Azúcar y melaza del Ingenio Porvenir de la recién finalizada zafra, por lo que consideró que su misión no es administrar la cosa pública con seriedad sino aprovecharse para enriquecerse junto a los suyos al vapor a su paso en la administración de la institución.