China y Estados Unidos intentarán limar asperezas en cuestiones que les separan como las tensiones en el mar de China Meridional, al tiempo que buscan consensos en áreas como la negociación de un tratado de inversiones, en el Diálogo Estratégico y Económico que empieza mañana en Pekín.
La delegación estadounidense, encabezada por los secretarios de Estado, John Kerry, y del Tesoro, Jack Lew, se encuentra ya en la capital china, aunque los dos días de sesiones no empezarán formalmente hasta el lunes, con el consejero de Estado, Yang Jiechi, y el viceprimer ministro chino, Wang Yang, como anfitriones.
Esta reunión anual entre las dos mayores economías del mundo, que alcanza ya su octava edición, llega con las disputas que China mantiene con sus vecinos marítimos como telón de fondo y en medio de cruces de acusaciones entre Washington y Pekín de militarizar la zona.
Estados Unidos, que dice ser neutral en el conflicto, ha enviado varios barcos y aviones militares al mar de China Meridional en los últimos meses, movimientos que han provocado airadas protestas de la diplomacia china.
El último roce tuvo lugar ayer mismo en Singapur, donde se celebra el Diálogo Shangri-La de seguridad en el sureste de Asia, y donde el secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, advirtió de que "las acciones de China en el Mar de China Meridional están aislándola, en un tiempo en que el que la región entera se une".
"Desafortunadamente, si estas acciones continúan, China podría terminar erigiendo una Gran Muralla de autoaislamiento", añadió.
Carter fue rebatido en ese foro por una general del Ejército chino, Yao Yunzhu, quien dijo: "no creo que cualquier estado tenga el derecho de imponer su interpretación sobre la libertad de navegación", y advirtió de que la operaciones estadounidenses pueden ser interpretadas como un acto de "preparación" para la batalla.
Niu Haibin, experto en relaciones internacionales del Instituto de Estudios Estratégicos de Shanghái, explicó a Efe que ambas partes necesitan garantizar la seguridad "evitando los errores de cálculo" en puntos calientes como el mar de China Meridional y la península de Corea.
Se espera que la situación en Corea del Norte sea otro de los puntos en la agenda, después de la visita realizada esta semana por una delegación de ese país a China y de que Estados Unidos intensificara sus sanciones financieras contra Pyongyang.
"Es crucial para ambas partes evitar conflictos en Asia al tiempo que mantienen la cooperación en una agenda global mucho más amplia", subrayó Niu.
Funcionarios chinos y estadounidenses han manifestado estos días su intención de que sus diferencias, que se extienden a áreas como la ciberseguridad o la situación de los derechos humanos en el gigante asiático, no les impidan avanzar en asuntos de interés común.
La lentitud en la recuperación de la economía mundial es una preocupación compartida por Pekín y Washington, que en la reunión financiera del G20 celebrada en febrero en Shanghái coincidieron en la necesidad de adoptar medidas para estimular el crecimiento.
En este sentido, los dirigentes chinos creen que, tras superar 24 rondas de conversaciones, están cerca de llegar a un acuerdo sobre el tratado bilateral de inversiones que ambas potencias negocian desde 2008.
"Los lazos económicos siempre han impulsado las relaciones bilaterales en general y queremos hacer ese impulso más poderoso", señaló el viceministro de Finanzas chino Zhu Guangyao.
Zhu anticipó que, de sellarse este acuerdo, sentará "una base todavía más sólida" para fortalecer el crecimiento económico de los dos países que tendría impacto a escala global.
Sin embargo, las empresas estadounidenses que operan en China critican la falta de reformas para dar igualdad de oportunidades a firmas locales y extranjeras y denuncian que las últimas normativas aprobadas por Pekín, especialmente en materia de ciberseguridad, dificultan su trabajo.
Desde la perspectiva de China, apuntó el experto del Instituto de Estudios Estratégicos de Shanghái, preocupa que Estados Unidos reconozca su estatus de economía de mercado, lo que cambiaría la forma en que calcula las sanciones por competencia desleal contra las compañías del país.
Junto al Diálogo Estratégico y Económico, China y Estados Unidos también celebrarán la séptima reunión de los intercambios entre pueblos, que la viceprimera ministra china Liu Yandong encabezará junto a Kerry.
El viceministro de Educación chino Hao Ping también avanzó esta semana que Pekín confía en firmar durante esa cita una docena de acuerdos culturales, educativos, de investigación científica y salud.