La Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) informó que culminó de manera exitosa la primera etapa del Programa de Rehabilitación de Redes y Reducción de Pérdidas, segundo eje del Plan Integral para el Sector Eléctrico, que cuenta con financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo, el Fondo OPEC para el Desarrollo Internacional (OFID), el Banco Mundial y el Banco Europeo de Inversión (BEI).

La entidad indicó que gracias a la iniciativa, cuya segunda fase inició recientemente con la meta de formalizar a cerca de medio millón de usuarios, cerca del 60% de los clientes del Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI) disfruta del servicio las 24 horas del día.

Con una inversión de US$261.6 millones, la CDEEE y las empresas distribuidoras ejecutaron 311 proyectos de rehabilitación, con 3,772 kilómetros de la red de distribución rehabilitados; 377,164 clientes normalizados; 296,376 usuarios convertidos en clientes, y 228,653 clientes tele-medidos, para sumar un total de 361,747.

“Si bien las pérdidas globales bajaron en algo más de 3%, en algunas comunidades la mejoría en este aspecto es impresionante, como el caso de comunidades como Tamboril, de Edenorte, en la que pasaron de 50% a 9.5%. En El Palmar de Engombe y La Gloria, ambas de Edesur, las pérdidas bajaron de 81% a 25.5% en el primero y a 19.7% en el segundo”, agregó la institución.

En el caso de Edeeste, se citan los sectores de Borojol y Villa Francisca, donde las pérdidas se redujeron de 45% a 10.3%, y como estos hay numerosos barrios urbanos y comunidades del interior.

Segunda etapa

La CDEEE sostuvo que estos logros de la primera etapa del Programa de Rehabilitación de Redes y Reducción de Pérdidas continuarán en este 2016, ya que la segunda fase inició recientemente.

Esta segunda etapa involucra una inversión de 358 millones de dólares financiados por la Banca Multilateral, más la contrapartida local, a lo que se suman los programas propios de las Distribuidoras, y la meta es la rehabilitación de 85 circuitos, 3,669 kilómetros de redes de distribución, la normalización de 433,399 clientes, con la meta de reducir las pérdidas en cerca de un 7%.
Incluye, además, la sustitución en 39 circuitos de los medidores convencionales por tele-medidores, para 334,556 nuevos clientes con medición remota.

Además se han invertido 30.57 millones en la construcción de 10 subestaciones y la repotenciación de 27, aumentando la potencia instalada de distribución en 378.13 MVA y beneficiando a 790,925 clientes.

En el área de transmisión, con una inversión de US$48 millones se han ejecutado 16 proyectos de construcción de líneas de transmisión y cables de guarda, para un total de 362 kilómetros, y se han invertido otros 16 millones de dólares en 7 proyectos de subestaciones de transmisión, para una adición de 740 MVA al SENI.

Además se han invertido 31 millones de dólares en proyectos de mantenimiento del sistema de transmisión para mejorar la disponibilidad y confiabilidad de los activos. En el área hidroeléctrica, se invirtieron 39.1 millones en diversos proyectos, de los cuales 10.5 millones de dólares se destinaron a la construcción de la Mini Central Hidroeléctrica Brazo Derecho; 11.6 millones en 38 proyectos de mantenimiento mayor en 26 centrales hidroeléctricas, entre ellas Hatillo, Jimenoa, Río Blanco I, Pinalito I y II, Sabana Yegua y Jigüey.

En cuanto a la Unidad de Electrificación Rural y Suburbana (UER) ha levantado 23 micro-centrales, 12 proyectos fotovoltaicos, unos 60 proyectos de electrificación de redes convencionales y cerca de mil proyectos de rehabilitación menores, beneficiando a unas 25 mil familias de localidades aisladas, donde nunca antes hubo energía eléctrica.