PUERTO ESPAÑA, Trinidad y Tobago.- Las 15 naciones de la Comunidad del Caribe (CARICOM), decidieron este martes suspender a la República Dominicana como miembro de la agrupación regional, ante la negativa de ese país de habla española para conceder la condición de la nacionalidad a los ciudadanos nacidos de inmigrantes haitianos ilegales.

"La Comunidad, en este momento, va a suspender el examen de la solicitud presentada por la República Dominicana para ser miembro de la Comunidad del Caribe", dijo Caricom en un comunicado.

La sentencia del Tribunal Supremo de la RD, del 23 de septiembre, afectaría a por lo  menos 210.000 personas nacidas en la República Dominicana de ascendencia haitiana.

Esta decisión modifica la legislación retroactivamente, y las personas que habían obtenido la ciudadanía dominicana durante el período 1929-2010, por ser de ascendencia haitiana o por estar “en tránsito”, la perderían. El Caricom teme que un gran número de personas que forman parte de la estructura misma de la sociedad dominicana sería despojado de la ciudadanía.

El tema fue tratado por la Mesa de los líderes de CARICOM en Puerto España, Trinidad y Tobago, este martes 26 de noviembre 2013. Participaron en la reunión Trinidad y Tobago, que preside el CARICOM, con su primera ministro, Kamla Persad Bissessar, el presidente haitiano, Michel Martelly, San Vicente y las Granadinas a través de su Primer Ministro Dr. Ralph Gonsalves, y Secretario General de CARICOM, Irwin LaRocque

CARICOM también ha anunciado que revisará sus relaciones con la República Dominicana en otros foros, incluso las relaciones en el Foro del Caribe (CARIFORUM) del grupo África, Caribe y Pacífico (ACP), en la Comunidad de Estados de América Latina y del Caribe (CELAC) y la Organización de Estados Americanos (OEA).

"No puede ser lo de siempre", dijo el CARICOM, que al mismo tiempo se comprometió a mantener la rama de olivo a la República Dominicana si recibe señales de que tomaría medidas correctivas en lo inmediato.

"CARICOM se prepara, pero el gobierno de la República Dominicana tiene que demostrar su buena fe con medidas creíbles inmediatas, como parte de un plan global para resolver la nacionalidad y cuestiones concomitantes en el menor tiempo posible", dijo la organización

A continuación se presenta el texto completo de la declaración del CARICOM sobre el fallo de la Corte Constitucional de la República Dominica sobre la Nacionalidad.

El CARICOM  acoge con satisfacción la intervención de Venezuela para ayudar a resolver la cuestión, pero, dadas las graves consecuencias humanitarias de la resolución judicial, el CARICOM  no puede permitir que su relación con la República Dominicana pueda continuar de forma normal. A este respecto, el CARICOM, en este momento, suspende el examen de la solicitud de la República Dominicana para ser miembro de la Comunidad del Caribe. Por otra parte, la Comunidad del CARICOM va a evaluar su relación con la República Dominicana en otros foros, incluso la del CARIFORUM, CELAC y la OEA. No puede ser lo de siempre.

La Comunidad del Caribe (CARICOM) condena el fallo aberrante y discriminatoria del 23 de septiembre de 2013, de la Corte Constitucional de la República Dominicana SOBRE la nacionalidad que excluye de forma retroactiva a decenas de miles de dominicanos, en su mayoría de ascendencia haitiana, de la ciudadanía haciéndolos sin estado y sin recurrir a la apelación

Es especialmente repugnante que la decisión  no tiene en cuenta la sentencia dictada en 2005  por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que la República Dominicana adaptara sus leyes y prácticas de inmigración de acuerdo con las disposiciones de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. El fallo también vulnera las obligaciones internacionales de derechos humanos de la República Dominicana. Por otra parte, la sentencia ha creado un entorno donde, con la abrogación de los derechos que se derivan de la ciudadanía, la arbitrariedad puede florecer como lo ilustran recientes informes de prensa de la deportación forzada a Haití de personas que alegan ser dominicanos y sin vínculos lingüísticos o familiares a aquel país.

La Comunidad del Caribe reitera su llamamiento al Gobierno de la República Dominicana que adopte las medidas políticas, legislativas, judiciales y administrativas necesarias con urgencia para remediar la grave situación humanitaria creada por el fallo. La Comunidad del CARICOM también pide a los países y las organizaciones regionales y hemisféricas prestar su voz para instar a la República Dominicana a corregir este terrible mal.

La Comunidad del CARICOM acoge con satisfacción la intervención de Venezuela para ayudar a resolver la cuestión, pero, dadas las graves consecuencias humanitarias de la resolución judicial, el CARICOM no puede permitir que su relación con la República Dominicana pueda continuar de forma normal. A este respecto, el CARICOM, en este momento, suspenda el examen de la solicitud de la República Dominicana para ser miembro de la Comunidad del Caribe. Por otra parte, la Comunidad va a evaluar su relación con la República Dominicana en otros foros, incluso la del CARIFORUM, CELAC y la OEA. No puede ser lo de siempre.

CARICOM apoya la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y solicitará una opinión consultiva de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Además, la Comunidad tendrá en cuenta la introducción de una Resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas que condena la sentencia.

Además hacemos un llamamiento a la comunidad mundial y regional para presionar al gobierno de la República Dominicana que adopte medidas urgentes para garantizar que la decisión del Tribunal Constitucional no se sostiene y que los plenos derechos de ciudadanía de las personas de ascendencia haitiana nacidss en la República Dominicana República están garantizados. La Comunidad del Caribe otorga este asunto la máxima prioridad.

CARICOM está preparado para acoplarse a la República Dominicana, pero el gobierno de la República Dominicana tiene que demostrar su buena fe con medidas creíbles inmediatas, como parte de un plan global para resolver la nacionalidad y cuestiones concomitantes en el menor tiempo posible.