SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Las dificultades que hay para el financiamiento de las plantas a carbón de Punta Catalina han despertado el “apetito” de empresas extranjeras que desean invertir capital en el proyecto, afirmó este lunes el vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).

Rubén Jiménez Bichara indicó que el conocimiento público de que no se pudiera materializar el desembolso del préstamo (por US$656 millones) concertado con el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), de Brasil, ha motivado que inversionistas, unos siete hasta el momento, se interesen en adquirir acciones o aportar el financiamiento para concluir la central.

“Este conocimiento generalizado de que hay problemas con el financiamiento (…) de ahí han venido ofertas de inversión, ya sea como participación accionaria y también como posibilidades de completar ese financiamiento, a condiciones también blandas; de ahí es donde surge este apetito por ser parte de Punta Catalina”, sostuvo.

El funcionario aseguró que a pesar de que el BNDES está intervenido -en el marco de un proceso judicial por corrupción-, las nuevas autoridades del Brasil ratificaron su disposición de seguir apoyando la construcción de la central a carbón mineral de 769 megavatios, valorada en unos US$1,945 millones.

“Todas las instituciones y las nuevas autoridades de Brasil han reconocido la transparencia, la calidad y todo lo que tiene que ver con Catalina, y han reafirmado su disposición de financiamiento, pero el banco estó intervenido”, lo que impide que se puedan efectuar los desembolsos.

El titular de la CDEEE reiteró que hay “mucho interés y un apetito muy grande” por parte de inversionistas privados, motivado además porque es un proyecto “que tiene un precio (de construcción) privilegiado” para ese tipo de plantas, con relación al mercado internacional.

Puntualizó, no obstante que cualquier negociación que implique la venta de acciones en Punta Catalina debe llevarse a cabo “con la mayor cautela y prudencia” posibles, ya que se trata de un importante activo y un patrimonio del pueblo dominicano.

“Como Gobierno no podemos negarnos a estudiar una oferta que se presente, pero sí hay que ser muy cautos, porque este un activo que tiene una vida útil por la calidad de sus equipos que se va a extender por más de 40 años, produciendo energía a precios competitivos”, dijo.

Jiménez Bichara señaló que la inyección de capital privado ayudaría al Estado a continuar promoviendo nuevos proyectos de generación que permitan al país satisfacer la demanda de electricidad, que crece a un ritmo de 125 megavatios por año.

En carta que fue remitida al Congreso como parte del anteproyecto de Presupuesto General del Estado para el 2017, el Gobierno dominicano indicó que contempla vender acciones del Proyecto Termoeléctrico de Punta Catalina por un monto de US$1,000 millones.