SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Semana desierta en lo que respecta a noticias económico-financieras locales, situación completamente opuesta en los mercados internacionales. A pesar de no haber contado con la referencia estadounidense el jueves por ser día festivo , el inicio de la semana ha concentrado prácticamente el 90% de las noticias relevantes, siendo 3 las que revistieron una mayor importancia e impacto en la evolución de los mercados que arrojaron un saldo negativo durante la semana pasada: la primera de ellas, las desavenencias entre Demócratas y Republicanos para finalmente no alcanzar un acuerdo en la reducción del Déficit Norteamericano; el “NO” rotundo por parte de Ángela Merkel y Nicolás Sarkozy a los, ya famosos, eurobonos y en último lugar la prolongación de las tensiones en los mercados de la deuda periférica Europea.
INTERNACIONAL
Mientras que la Comisión Europea hacía campaña para convencer a los diferentes estados miembros de la Zona Euro de introducir los “bonos de estabilidad” para satisfacer las necesidades de financiación de todos los países miembros y por la cual se crearía un gran mercado que podría competir con los títulos del tesoro estadounidense como punto de referencia mundial , Ángela Merkal se enrocaba en su negativa a los eurobonos. Según declaraciones de la CE, adoptar este enfoque sería el más efectivo para obtener los beneficios de una emisión estable de obligaciones del estado además de asegurar la refinanciación completa de todos los países miembros, sin tener en cuenta la situación de las finanzas públicas de cada país. Motivo este, más que suficiente para que los alemanes capitaneados por la Canciller Alemana Merkel se opongan radicalmente a una agrupación de deuda pública tan extensa en la que, según su opinión, se aliviaría la presión en los países de la zona euro más derrochadores y se permitiría que las economías más débiles se aprovechasen de la tasa de crédito alemana.
De hecho, la canciller alemana ha subrayado que aunque se consiga progresar hacia una mayor unión fiscal no cambiará su postura respecto a los eurobonos o el papel del Banco Central Europeo. "Cuando demos un primer paso hacia la unión fiscal, por ejemplo mediante el fortalecimiento del Pacto de Estabilidad y Crecimiento con el uso de sanciones automáticas, será un avance pero no un motivo para que cambie de opinión", y que "forzar las cosas” no es la solución y ha hecho hincapié en que los "eurobonos distorsionarían los umbrales de tipos en la deuda". En su opinión, lo que necesita ahora la zona euro es "encontrar la confianza". Al mismo tiempo, Merkel ha calificado "extraordinariamente inapropiado" que la Comisión Europea hiciera propuestas sobre la emisión de bonos conjuntos en estos momentos y que sigue firmemente convencida de que el mandato del BCE no puede ni debe modificarse.
Igualmente, Sarkozy tampoco se ha mostrado partidario de los eurobonos según una declaraciones hechas por el presidente Francés "No es útil, sino peligroso, proponer eurobonos sin hablar de gobernanza", señaló.
Por otro lado a inicio de la semana, Fitch avisaba de que si la crisis de la eurozona se intensifica, y las presiones sobre los bancos de la unión monetaria se están comenzando a trasladar a las filiales de la Europa emergente, lo que a su vez podría reducir la capacidad de crédito y debilitaría el crecimiento en muchos de sus países , entre ellos Croacia, Bulgaria, Serbia y Rumanía por ser de los que tienen los vínculos más fuertes con Grecia e Italia, mientras que en el caso de Polonia, Hungría y la República Checa la propiedad extranjera de sus entidades está más diversificada. En cambio, la presencia de bancos portugueses, irlandeses y españoles es "limitada" en toda la región de Europa del Este.
A mitad de la semana se conocía que Hungría había presentado a la Comisión Europea una solicitud a la UE y al FMI para acceder a una línea de crédito preventiva, con lo que el Ejecutivo comunitario estudiará ahora la petición, según informó un portavoz de la CE. Mientras el mercado digería la noticia, se supo que la pasada semana una misión de expertos regresaba a Bruselas tras concluir una investigación de supervisión en Budapest sobre los compromisos adquiridos por Hungría para obtener ayudas del esquema de apoyo a la Balanza de Pagos que la UE creó para ayudar a los países del Este a superar la crisis económica. Hungría recibirá 6.500 millones de euros del mecanismo, dotado con 50.000 millones de euros y del que también se han beneficiado Letonia y Rumanía. Como desenlace de esta historia el viernes, Moody´s rebajaba la deuda de Hungría a “bono basura” desde Baa3 A Ba1, justificando este downgrade por las dudas en torno a la capacidad del país para reducir su deuda pública.
Sin olvidarnos de la agitación vivida durante las últimas semanas en Italia, el primer ministro italiano, Mario Monti está preparando un plan de ajuste de 15.000 millones de euros para los dos próximos años que se unirán a los 64.000 millones ya previstos en el plan exigido por la UE. Monti explicará su plan en el Parlamento a finales de la próxima semana, entre la reunión del Eurogrupo que tendrá lugar el 29 de noviembre y el Consejo Europeo del 8 de diciembre, según informó el diario 'Corriere della Sera'.
Al igual que en semanas anteriores, el Banco Central Europeo (BCE) aceleró su ritmo de compra de bonos periféricos en los mercados secundarios destinando 7.986 millones de euros en la semana, cerca del doble de lo invertido en la semana anterior según los datos divulgados por la entidad presidida por Mario Draghi.
Por otro lado, Fondo Monetario Internacional (FMI) creó la semana pasada una nueva línea de crédito flexible y preventiva para romper las "cadenas de contagio" en la zona euro permitiendo a los países que la componen acceso a la financiación para cubrir las necesidades a corto plazo. Los países podrán recibir crédito a 12 y 24 meses hasta el 1000% de la cuota de cada miembro. El FMI dijo que su Línea de Liquidez Preventiva será más flexible y actuará como un "seguro contra futuros choques y como una venta de liquidez de corto plazo para abordar las necesidades de los testigos inocentes de la crisis". Christine Lagarde, director del FMI, aseguró que estas nuevas herramientas permitirán al FMI responder efectivamente y más rápido para ayudar a los países a lidiar con la crisis.
Volviendo a las agencias calificadoras de rating, Fitch ha rebajado la calificación de Portugal hasta la categoría bono basura, pasando de BBB- a BB+, con perspectiva negativa. Fitch justificó su rebaja alegando los grandes desequilibrios fiscales, el alto endeudamiento en todos los sectores y las perspectivas macroeconómicas adversas. Con los últimos anuncios hechos por Portugal en cuanto a las reformas estructurales que el país llevará a acabo próximamente se espera que éstas, dejen al país en una posición más competitiva en el largo plazo.
Por si esto fuera poco, Fitch también rebajó la nota de solvencia de los bancos portugueses Caixa Geral de Depositos (CGD), Banco Comercial Portugues (Millennium bcp) y Banco BPI, hasta 'BB+' desde 'BBB-', lo que equivale a la categoría de 'bono basura', así como sus calificaciones a corto plazo, que bajan a 'B' desde 'F3′, como consecuencia del recorte del 'rating' de Portugal. En los tres casos la perspectiva es 'negativa'. Asimismo, la calificadora de riesgos ha ratificado la nota de Caixa Economica Montepio Geral (Montepio Geral) y de Banco Internacional do Funchal (Banif) en 'BB' y 'B', respectivamente. La perspectiva de ambas calificaciones es 'negativa'.
En cuanto a datos macroeconómicos en el viejo continente , se conoció el dato de confianza de los consumidores, que siguió descendiendo en la UE en noviembre al llegar a -20,7, y en la zona euro, donde se situó en -20,4, según el índice adelantado que divulgó la Comisión Europea. En octubre, la confianza de los consumidores en la Unión Europea se había situado en -20,2, mientras que en los diecisiete países del euro había quedado en -19,9.
Por otro lado, el indicador de confianza de los empresarios alemanes experimentó una inesperada mejoría en noviembre, después de haber encadenado casi medio año a la baja. Concretamente, la confianza empresarial pasó de los 106,4 puntos del mes anterior a 106,6 enteros, según la encuesta del Instituto de Investigación Económica alemán (Ifo). En concreto, el indicador del Ifo para valorar la presente coyuntura se mantuvo estable en 116,7 puntos, mientras que respecto a las expectativas de futuro el índice mejoró tres décimas respecto a octubre, hasta 97,3 puntos.
En el nuevo continente todas las miradas al inicio de la semana estaban puestas sobre la reunión del “Super Comité” compuesto por Demócratas y Republicanos con el objetivo de lograr un acuerdo para reducir el déficit que finalmente fracasó, y que en consecuencia se aplicarán los términos del acuerdo bipartidista alcanzado durante el pasado mes de agosto, en el que finalmente se aplicarán recortes de gasto de forma automática en Defensa y en los programas sociales por valor de 1.2 billones de dólares a partir de 2013.
El sector bancario de EEUU ha encadenado su noveno trimestre consecutivo siendo rentable. La mejoría que han experimentado las arcas de las entidades estadounidenses ha permitido una reducción en el número de bancos que aún tienen problemas financieros, a finales del tercer trimestre de 2011 el número de bancos estadounidenses en problemas se redujo a 844 entidades, frente a las 865 del segundo trimestre y a las 888 de los tres primeros meses del año.
Macroeconómicamente destacan, el crecimiento de la economía americana durante el tercer trimestre del año en un 2% en tasa anualizada, por debajo del 2,5% de la primera estimación y por debajo también de lo esperado por los analistas. De acuerdo con los datos del Departamento de Comercio, el consumo creció un 2,3% en el tercer trimestre, una décima menos del 2,4% que incluía la estimación anterior.
Por otro lado, el número de peticiones de subsidio por desempleo en creció la semana pasada pero se mantuvo por debajo de las 400.000 por tercera semana consecutiva, lo que sugiere una leve recuperación del mercado laboral. Se tramitaron un total de 393.000 subsidios desde las 391.000 de la semana anterior, según publicó el Departamento de Trabajo. Los economistas consultados por Reuters esperaban que la cifra aumentara hasta las 390.000.