BERLÍN, Alemania.- Las autoridades alemanas buscan fórmulas para compatibilizar el derecho a la manifestación con el distanciamiento social impuesto para contener la COVID-19, pese al desafío que ello supone para las fuerzas de seguridad.
La libertad de manifestarse es un "derecho fundamental", recordó hoy el primer ministro de Baviera, Markus Söder, ante la cámara regional de ese "Land", el más afectado del país por el coronavirus y también el que ha aplicado las medidas más restrictivas.
Söder aludió además a la sentencia dictada la semana pasada por el Tribunal Constitucional (TC), en respuesta a un recurso de urgencia interpuesto por los convocantes de dos manifestaciones que habían sido desautorizadas por sus respectivos poderes locales.
Las autoridades locales se remitieron para ello a la prohibición de orden general para toda reunión de más de dos personas impuesta en toda Alemania como medida contra la pandemia. El TC dio parcialmente la razón a los convocantes, al estimar que no puede haber un veto general al derecho a la manifestación.
Baviera analiza, según Söder, la forma de garantizar ese derecho y evalúa como posible fórmula grupos de hasta 20 participantes que mantengan entre sí la distancia interpersonal de 1,5 metros.
En ese "Land" se han verificado hasta hoy 37.849 contagios y 94 víctimas mortales, entre el cómputo total de 141.672 personas infectadas y 4.404 muertos reportados este lunes por el Instituto Robert Koch (RKI), competente en la materia en Alemania.
Otros estados federados menos afectados por la pandemia, como Brandeburgo, el "Land" que envuelve a Berlín, así como el gobierno regional de la ciudad-estado y capital alemana, estudian a su vez posibilidades semejantes.
RELAJACIÓN DE LAS RESTRICCIONES
El gobierno de la canciller Angela Merkel y los líderes regionales acordaron el pasado miércoles mantener hasta el 3 de mayo el distanciamiento social, aunque empezaron a relajar las restricciones. Su implementación corresponde a los "Länder".
Este fin de semana se registraron ya algunas manifestaciones de carácter minoritario en Berlín y en otros puntos del país. La policía conminó a los concentrados a disolverse por megafonía, lo que produjo algunos momentos de tensión.
Los agentes policiales iban en su mayoría con mascarillas de protección, mientras que los manifestantes aludían al derecho fundamental a la libertad de manifestación.
En Alemania no se ha ordenado un confinamiento estricto, sino que se permiten las salidas conjuntas de núcleos familiares u otras personas que convivan, así como el deporte y ejercicio al aire libre de forma individual.
En la práctica, en los parques pueden formarse grupos de hasta 20 personas. La policía no suele actuar más que ante casos flagrantes de vulneración de las normas.
ANGELA MERKEL SOBRE RELAJACIÓN DE LAS RESTRICCIONES
La canciller alemana, Angela Merkel, alertó este lunes de que el creciente debate en su país en torno a la relajación de las restricciones en la vida social y la actividad económica puede dañar los frágiles avances contra la COVID-19.
Según informan medios alemanes, en una videoconferencia de la dirección de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU), Merkel se mostró preocupada por la posibilidad de que la premura por reabrir negocios y permitir actos públicos en algunos estados federados de al traste con la contención de la pandemia.
A su juicio, esto eleva fuertemente el riesgo de una recaída, pues transmite a la ciudadanía la sensación de que se ha superado la crisis, lo que conllevaría una relajación de las actuales prevenciones, como la distancia social, el lavado frecuente de manos y las mascarillas.
Algunos "Länder" comienzan este lunes a dar pasos hacia la normalización, aunque con muchas restricciones y medidas de protección, tal y como acordaron los 16 estados federados y el Gobierno central el pasado miércoles.
Los "Länder", no obstante, al tener las competencias, pueden concretar de forma diferente las líneas generales pactadas, dependiendo de sus necesidades, intereses y efectos de la pandemia en su territorio.
A partir de este lunes pueden abrir los negocios de hasta 800 metros cuadrados y el último curso de la formación obligatoria puede volver a las aulas, aunque en algunos estados federados esta medida no entrará en vigor hasta dentro de dos semanas.
Las reglas de distanciamiento social, sin embargo, se mantendrán como mínimo hasta el 3 de mayo, como se acordó el pasado miércoles.
En la videoconferencia, la canciller apuntó que el próximo 30 de abril habrá una nueva negociación del gobierno central y los "Länder" para estudiar nuevos pasos en el regreso hacia lo que se ha dado en denominar "nueva normalidad".
En opinión de Merkel, será importante valorar los efectos económicos y sanitarios de estos primeros pasos hacia la normalización.
Alemania es uno de los países con más casos registrados, pero con una de las menores tasas de mortalidad. Según los últimos datos del Instituto Robert Koch, centro de referencia nacional en epidemiología, hasta el momento se han registrado 141.672 infectados y 4.404 muertes.
El pasado viernes el ministro de Sanidad, Jens Spahn, indicó que la pandemia parecía ya "controlable", pues la tasa de contagio había caído hasta el 0,7, esto es, que cada nuevo infectado contagia a menos de una persona, lo que aplana sensiblemente la curva de afectados.
EUROBONOS
Merkel, instó este lunes a buscar mecanismos comunitarios para ayudar a los países de la Unión Europea (UE) más afectados por la pandemia dentro de los actuales tratados, descartando así implícitamente opciones como la de poner en marcha los llamados "coronabonos".
Merkel indicó en rueda de prensa que cualquier solución que "no esté dentro de los tratados" implicaría la elaboración de un nuevo texto comunitario que llevaría "dos o tres años", cuando las ayudas se precisan de manera inmediata.
La canciller subrayó no obstante que "Alemania quiere ser y será solidaria" en estos momentos de crisis, a la vez que agregó: "Me duele casi tener que repetirlo". EFE