La Asociación Dominicana del Acero (Adoacero) alertó que la sobreproducción de China de este material está impactando negativamente a los países que producen y comercializan este material, sobre todo por el subsidio estatal que reciben las fábricas del país asiático, que fue condenado recientemente en la cumbre del G20.

Adoacero entiende que República Dominicana debe tomar medidas para proteger su producción, como lo han hecho Estados Unidos, Canadá, México, La Unión Europea y otros países del mundo, para que las prácticas desleales de comercio que se presentancon los productos del acero provenientes de China no sigan impactando el mercado local.

“Si las varillas chinas, que se producen con subsidios estatales y una política de proteccionismo por parte de ese Estado, continúan llegando al mercado dominicano eso pudiera traducirse en una pérdida de competitividad letal para nuestra industria y por consiguiente, en pérdidas de miles de empleos directos e indirectos” advirtió Alfredo Baduí, director ejecutivo de la entidad

El empresario agregó que “es imposible competir en igualdad de condiciones si hay un país, que además es un gigante con economía centralmente planificada, que está distorsionando las reglas de juego y está llevando a cabo prácticas desleales de comercio”.

Impacto global

Según los datos de la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero), China está produciendo más del 77% del acero que se comercializa en el mundo, y cerca de la mitad de sus fábricas son participadas accionarialmente por el Estado.

Además de que esa nación impuso un arancel de 20% a la exportación de palanquillas “con la intención de encarecer la materia prima a los países que producen varillas” para construcción.

Ambas prácticas han sido condenadas por el G20 por considerarlas desleales para el comercio, indicó Alacero en un reciente comunicado, donde reclamaba que los gobiernos tomaran acciones responsable y urgentes para solucionar la situación.

Para Adoacero es de vital importancia que la República Dominicana tome la medidas necesarias que permitan salvaguardar la producción local “y que podamos seguir siendo competitivos” a nivel de la región.