Ciudad del Vaticano.- El viceministro dominicano de Planificación del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD), Yván Rodríguez, afirmó que a pesar de la baja presión o carga tributaria, el Gobierno de la República Dominicana ha introducido significativos cambios en la administración tributaria que han generado hasta un 0.6% de nuevos ingresos.

El funcionario dominicano explicó que estos cambios se han producido sin necesidad de recurrir a nuevos ajustes fiscales que afecten a los sectores de los quintiles más bajos de la canasta familiar.

Rodríguez expuso durante su participación en la reunión de la Coalición de Ministros de Finanzas para la Acción Climática (CAPE), celebrada en la ciudad del Vaticano. “En ese sentido, la administración del Presidente Danilo Medina ha desencadenado una fuerte guerra contra la evasión y elusión tributarios, que en el IVA supera el 40% y en el ISR más del 60%”, destacó el viceministro.

Asimismo, manifestó que el Gobierno dominicano ha consolidado las finanzas públicas manteniendo el balance fiscal en niveles inferiores al 3% del PIB. Dijo que el país ha asumido con la mayor seriedad la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

“Contamos con un plan de nación, la Estrategia Nacional de Desarrollo, que mantiene una alineación del 73% con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible”, puntualizó Rodríguez.

Ponderó que el Gobierno ha constituido una Comisión de Alto Nivel para el cumplimiento de los ODS, que integra al sector público, empresa privada, a la academia y a la sociedad civil bajo el lema de que nadie se quede atrás.

Recordó que República Dominicana presentó en el 2018 el Primer Informe Voluntario ante las Naciones Unidas con grandes logros en cada una de las metas e indicadores de los ODS. “Pero reconocemos que aún nos falta mucho por hacer”, concluyó Rodríguez.

Significó que para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible se requerirá una sólida movilización de recursos internos.

Situación de la región

Puntualizó que la región afronta varios desafíos en este ámbito, como los bajos niveles de tributación, con una razón media de impuestos sobre producto interno bruto (PIB) del 22,8% en 2015 (11,4 puntos porcentuales menos que el promedio del 34,3% del PIB observado en los países de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE)), y la débil recaudación mediante tributos directos, especialmente en el caso del impuesto sobre la renta de las personas físicas.