El Ministerio de Industria y Comercio (MIC) informó que ha diseñado un programa de fortalecimiento de las capacidades competitivas del sector productivo, con el objetivo de mitigar los efectos que se derivan de la desgravación arancelaria por el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Centroamérica (DR-CAFTA, en inglés).

La estrategia “consiste en la realización de actividades destinadas a mantener informado a los diversos sectores, a los fines de que éstos puedan tomar las previsiones necesarias para mitigar los efectos que pudieran derivarse del libre comercio”, explicó Katrina Naut, titular de la Dirección de Comercio Exterior y Administración de Tratados Comerciales (Dicoex) del MIC.

Naut manifestó que se da seguimiento a la Ruta que se lanzó en el 2014, lo que ha permitido “la realización de actividades de difusión de información, crear sensibilización y brindar asesoría técnica, logrando de esta forma que nuestros entes productivos conozcan en detalle el proceso de liberalización” negociado en el marco del DR-CAFTA.

Indicó que las negociaciones de este acuerdo se realizaron en diferentes fases, las cuales se clasificaron con letras y se conocen como canastas, y cada una de estas representa un tiempo determinado o modalidad de desgravación.

Productos sensibles

La funcionaria sostuvo que muchas de estas canastas han ido desgravando hasta alcanzar el libre comercio. “Tal es el caso de productos industriales, quedando sólo pendiente de desgravar aquellos productos considerados sensibles” para la economía dominicana.

En este caso particular, se refirió a productos agrícolas y agroindustriales, que por su sensibilidad fueron negociados a plazos más largos de desgravación, es decir a 12, 15 y 20 años.

En lo que respecta a aquellos productos que alcanzarán el libre comercio en año 2017, es decir el año 12 del Tratado, fueron negociados en la categoría “N”, y los mismos se han venido desgravando en etapas anuales iguales desde la entrada en vigencia del acuerdo.

Naut explicó que el DR-CAFTA categorías de desgravación que en el año 2020, que sería el año 15 de la implementación del Tratado, alcanzarán el libre comercio.

Estas son las categorías “D” y “O”, las cuales comprenden aproximadamente unas 140 líneas arancelarias correspondientes al sector agropecuario, las cuales están compuestas por productos tales como: Cebolla, ajo, queso, maíz, harina de trigo, embutidos, cervezas de malta, ron y aguardiente de azúcar, yuca, batata, tabaco negro y rubio, bananos, aguacate, entre otros.

“Tenemos productos que además de ser negociados con plazos de desgravación más largos, también fueron negociados con periodos de gracia de diez años, es decir que mantuvieron su tasa base durante los años 1 al 10 del Tratado, y es a partir del año 11 (2016) cuando comienzan a desgravar hasta alcanzar el cero por ciento en el año 2025”, siendo éste el caso de los muslos de pollo, el arroz, la leche en polvo y el queso mozzarella, precisó la funcionaria.

Asimismo, resaltó que estos escenarios muestran como paulatinamente se ha ido abriendo el comercio del país frente a uno de sus principales socios comerciales, por lo que se hace cada vez más necesario incrementar la competitividad de nuestros sectores productivos y el fortalecimiento de nuestra capacidad productiva y exportadora.