SANTO DOMINGO, República Dominicana. – Un estudio de Madurez digital de MIT Sloan Management Review y Deloitte revela que únicamente un 30% de las organizaciones en el mundo presentan una madurez digital que incluye la preparación de la fuerza laboral, y partiendo de las Tendencias de Capital Humano 2018 de Deloitte, un 60% de empresas no cuenta con planes articulados para el desarrollo de las habilidades necesarias en la industria 4.0.

Según los datos, el grado de preparación para enfrentar el cambio ante la irrupción de la inteligencia artificial, la automatización, la explosión de la data y la diversidad generacional; no es suficiente.

Cristina Cubero, directora de consultoría de Deloitte, dijo que se trata de un desfase crítico que bloqueará las posibilidades de empleo para las personas y el desarrollo para los países.

Cristina Cubero, directora de consultoría de Deloitte
Cristina Cubero, directora de consultoría de Deloitte

“Avanzar a estados más maduros de la era digital con una fuerza “análoga” conformada exclusivamente por personal a tiempo completo y en planilla, resta no solo potencial de productividad e innovación, sino, posibilidades de permanecer en mercado”, Cristina Cubero, directora de consultoría de Deloitte.

Considera necesario incursionar en las herramientas y métodos que permitirán diseñar la fuerza laboral del futuro de manera optimizada. Para esto, insta a las empresas a pensar en el reto de la atracción y retención del talento, pues ese aspecto compite con la nueva fuerza laboral y el nuevo mundo del trabajo.

Recomendaciones para arribar la Industria 4.0

Como instrucción inicial, Cubero propone que embarcarse en esa movilización requiere analizar la naturaleza del trabajo (qué), la caracterización de la fuerza laboral (quién) y el lugar de trabajo (dónde).

Qué. En el primero de ellos la recomendación es hacer un mapeo de las actividades de la empresa, identificando cambios en el trabajo, nuevas ocupaciones y habilidades necesarias. Plantea que muchos manuales organizacionales están desfasados y no existe visión integral de nuevas tareas, nuevas habilidades y oportunidades de automatización. “Cuando se realiza este mapeo las organizaciones se re-descubren y entienden el tamaño de las brechas y las oportunidades potenciales”.

Quién. “¿Qué porción de esas tareas debe realizarlas un trabajador de planilla a tiempo completo, un empleado contingente, un centro de servicios compartidos o un robot? ¿Una persona joven, un adulto mayor con horarios flexibles?” son las preguntas correspondientes al quién. La gama de opciones en el futuro 4.0 es híbrida y la diversidad permite navegar en un mundo digital.

Dónde. Cubero explica que se debe estudiar el lugar que genera más productividad y agilidad, considerando como opciones  las actividades en entornos virtuales, físicos, flexibles, y en qué geografía.

“En un futuro dónde las máquinas se encargarán de las tareas transaccionales y lucharán por más, las personas no deben competir por el trabajo de un robot sino de las otras personas que asumirán las tareas complejas y creativas”.