Bruselas, 6 jun (EFE).- El Consejo de la Unión Europea (UE) adoptó hoy un reglamento que pone fin a las excepciones que permiten cortar a bordo de los buques las aletas de los tiburones, para evitar que se deseche el resto del cuerpo una vez obtenida la parte que más se valora del animal.

La regulación, que ha sido acordada con el Parlamento Europeo y ha sido aprobada con el voto en contra de Portugal, entrará en vigor una vez que se firme oficialmente y sea publicada en el Diario Oficial de la UE.

La controvertida práctica de cortar las aletas y arrojar al mar el resto del cuerpo del tiburón está prohibida en la UE desde 2003, pero la legislación vigente prevé ciertos casos en los que se permite conceder permisos especiales para seguir haciéndolo.

El nuevo reglamento eliminará estas excepciones y obligará a los buques pesqueros a desembarcar todos los ejemplares de tiburones con las aletas adheridas.

De este modo, las aletas y los cuerpos ya no podrían ser descargados en puertos diferentes, lo que facilitará la detección y el control del cercenamiento a bordo de los buques de la Unión.

La medida afectará a las flotas de España y Portugal, que son las únicas que se dedican a esa pesca y que se benefician de esos permisos, algo que justifican por la necesidad de mejorar el espacio de almacenamiento en los buques.

Los pescadores españoles calculan que los cambios legislativos que propone Bruselas costarán entre 9 y 10 millones de euros de pérdidas al sector.

El Consejo de la UE recordó que tanto los tiburones como las rayas son especies "muy vulnerables a la sobreexplotación", y que en los últimos años algunas poblaciones de estos peces se han visto "en grave peligro" debido al aumento de su demanda, especialmente de las aletas de tiburón, que se utilizan en cocina y para remedios tradicionales en Asia.

La asociación a favor de los animales Humane Society International celebró la adopción de este reglamento, que permitirá solucionar las "lagunas" de la legislación vigente.

"Estamos satisfechos porque la Comisión, el Parlamento y la mayoría de los Estados miembros de la UE reconocen que la legislación vigente era imposible de aplicar y han tomado las medidas necesarias para proteger a los tiburones", afirmó la directora de la asociación, Joanna Swabe, en un comunicado.

La asociación denunció que decenas de miles de tiburones mueren cada año en los océanos debido a la pesca que se centra en cortarles las aletas para venderlas como productos culinarios.

Además, recordó que la UE es uno de los mayores exportadores de aletas a Asia, pese a que un tercio de las especies de escualos y rayas están consideradas como "en peligro" por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. EFE