SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El director del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi), Olgo Fernández, exhortó este miércoles a la población a racionar el uso del agua, ante la disminución en el suministro que se prevé en algunas provincias, por los bajos niveles de lluvia y de caudal en las principales presas del país.
En un encuentro con representantes y titulares de las demás instituciones vinculadas al sector agua, Fernández informó que debido a las pocas lluvias que cayeron en territorio nacional en el pasado año, hay una deficiencia crítica del líquido en los embalses de donde se abastecen buena parte de los acueductos regionales, las hidroeléctricas y los sistemas de riego.
Indicó que al cierre del 2014 la presa Tavera-Bao, que suple a Santiago y otras regiones importantes, mantuvo un caudal promedio de apenas 19.20 metros cúbicos por segundo (m3/Seg), frente al promedio histórico de 38.8 m3/Seg, es decir, que operó a la mitad de su capacidad. Asimismo, la presa de Hatillo tuvo una media de 22.9 m3/Seg, muy inferior al nivel histórico de 58.22 m3/Seg; mientras que en Jigüey el descenso fue 17.10 a 3.95 m3/Seg, y de 20.16 a 9.79 m3/Seg en la presa de Valdesia.
“Con este cuadro que terminamos el 2014 y los pronósticos que tenemos para el 2015, estamos llamando a la 'racionalización' y advirtiendo a todas las instituciones que manejan el sector agua para que iniciemos una campaña de concientizar a la ciudadanía para el uso racional del agua en este primer trimestre”, dijo.
Entre las provincias más perjudicadas ante una eventual escasez, el funcionario citó a Santiago, San Cristóbal, Baní, Azua, Monte Cristi, además San Juan y Barahona, e incluso el Gran Santo Domingo. Explicó que los bajos caudales de la cuenca del río Nizao, que alimenta a la presa Jigüey, han provocado una disminución en el suministro para riego en las provincias Peravia y San Cristóbal.
Fernández indicó que el Indhri “ha adoptado medidas especiales en las regiones afectadas por el déficit de los embalses de las presas, como la construcción de lagunas para almacenar agua para mojar predios agrícolas y dar de beber al ganado”, así como un monitoreo permanente de estas infraestructuras.
De su lado, el subdirector de Operaciones de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), Luis Salcedo, apuntó que los sectores más afectados son “los que se abastecen de fuentes superficiales directas, que no tienen una presa de almacenamiento”.
Agregó que en el Gran Santo Domingo la reducción drástica en los caudales de los embalses se sentiría con más fuerza en sectores como Los Alcarrizos, Manoguayabo o Herrera, por lo que la CAASD ha activado un “Plan de Contingencia” que incluye una brigada de 20 camiones cisternas para proveer agua en los barrios.
Salcedo pidió la colaboración de la ciudadanía para que informen a la CAASD de cualquier escasez que se presente en algún sector, para entonces proceder a enviar hasta allí a los camiones del organismo.
Asimismo, el director del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa), Alberto Holguín, advirtió a los agricultores que se abstengan de hacer un uso “abusivo” del agua para fines de riego o agroindustrial, ya que quienes lo hagan estarían agravando la situación y serán sancionados con medidas coercitivas.
2014, un “año seco”
Gloria Ceballos, directora de la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet), catalogó al 2014 como un “año seco”, que presentó unos niveles de pluviometría o lluvias por debajo de lo normal en 10 de los 12 meses.
Indicó que aunque las proyecciones apuntan a una mejoría en este aspecto, hay posibilidades de que la sequía se siga manifestando en los primeros meses del 2015, dado que “enero, febrero y marzo son históricamente los meses más secos” del año, de una tradicional “sequía estacional”.
“Todavía hay una probabilidad de alrededor de un 60% de que en los primeros meses del 2015 se siga manifestando esa sequía que nos afectó en el 2014, del fenómeno El niño, débil, pero tendiendo que a mejorar ya para mediados de año”, manifestó la funcionaria.
Adelantó que, según los pronósticos, para este fin de semana y la semana próxima “producto de una vaguada en la Cordillera Central, vamos a tener algunas lluvias, que no van a satisfacer todas las necesidades que tienen los embalses, pero podrían ser un ligero paliativo”, para las regiones Noroeste, Norte y Noreste del país.