SANTO DOMINGO, República Dominicana.-La Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (CONFENAGRO) mostró este jueves preocupación por la situación sanitaria de la ganadería y la agricultura, y advirtió que esa situación afecta de manera considerable la seguridad alimentaria del país, debido a la debilidad mostrada en los controles de plagas, así como la proliferación de enfermedades que afectan a animales y plantas.

“Ambas situaciones, aunque no afectan a la población humana, tienen un gran impacto en la producción agrícola nacional. El país está fuera de control en plagas como la tuberculosis bovina, el Newcastle avícola, la influenza aviar, la mosca de la fruta, el trips y también innumerables plagas que afectan las exportaciones de frutas y vegetales al mercado europeo”, explicó Hecmilio Galván, vicepresidente ejecutivo de Confenagro.

Al participar en un encuentro sobre la situación de la sanidad agropecuaria en República Dominicana y propuestas de Confenagro, realizado en la sede de la entidad, Galván advirtió que se hace imprescindible revisar y actualizar la legislación en materia de sanidad animal y vegetal, que permita también el desarrollo de capacidades para la agro-exportación, “debido a que las leyes vigentes ya están desactualizadas para garantizar una efectiva protección sanitaria”.

Durante el encuentro, al que asistieron productores agropecuarios de distintas zonas del país, Confenagro sugirió la creación del Instituto Nacional de Sanidad Agropecuaria y la Inocuidad de los Alimentos (INSAIA), que sería un organismo descentralizado para articular todas las acciones en materia de sanidad e inocuidad en el país.

El dirigente agropecuario dijo que otras amenazas que se ciernen sobre el país son la posible entrada de plagas peligrosas como el Fusarium Raza 4 Tropical de las Musáceas, que destruiría la producción bananera y de plátanos; la Monilla del cacao, que devastaría la cacaocultura nacional, así como la Tuta Absoluta, el minador del tomate, que podría destruir la producción de tomates.

“En el área pecuaria estamos amenazados por la fiebre aftosa que podría devastar el hato ganadero del país, pero también la fiebre porcina africana, que sería catastrófica para la producción de cerdos”, indicó.

Confenagro entiende que es lamentable que esas situaciones ocurran “ante el desmembramiento total de los programas de control y de prevención de la sanidad agropecuaria, así como una paralización total del Ministerio de Agricultura y la Dirección General de Ganadería, siendo una muestra de este descontrol la reciente situación con la avicultura nacional”.

Respecto a la legislación vigente sobre sanidad agropecuaria, y que advierte no está a tono con los tiempos, Galván refirió la Ley 4990 sobre sanidad vegetal, de septiembre de 1958 y las disposiciones sobre sanidad animal contenidas en la Ley 4030, del 15 de enero de 1955, que declara de interés público la defensa sanitaria de los ganados del país, y la Ley 311, de Registro de Plaguicidas de julio de 1968.

“Lo anterior implica que el país carece de un moderno sistema de protección zoosanitaria, basado en una legislación acorde con los requerimientos nacionales y en cumplimiento y satisfacción de las exigencias y compromisos internacionales, lo que se traduce en severas restricciones que obstaculizan el comercio nacional e internacional de animales, productos y subproductos de origen animal y vegetal”, explicó.

Red de laboratorios agrícolas

El Instituto Nacional de Sanidad Agropecuaria y la Inocuidad de los Alimentos agruparía a instituciones como la Dirección de Sanidad Vegetal del Ministerio de Agricultura; la Dirección de Sanidad Animal de la Dirección de Ganadería, así como algunas funciones de la Dirección General de Medicamentos, Alimentos y Productos Sanitarios del Ministerio de Salud Pública.

Asimismo, planteó se cree la red de laboratorios agrícolas, pecuarios y de inocuidad a nivel nacional, y articular una política de sanidad agropecuaria que dé garantía a la seguridad alimentaria del país, la inocuidad de los alimentos y permita la expansión de las exportaciones nacionales.

En la actividad, que fue coordinada por Galván, participaron con explicaciones técnicas Emigdio Gómez, ex director de Sanidad Agrícola del Ministerio de Agricultura; el técnico Guido Gómez, representante nacional de Oirsa. También estuvieron presentes Luis Ramón Rodríguez, ex ministro de Agricultura, Buenaventura González, presidente de la Asociación Dominicana de Ingenieros Agrónomos (ADIA); Gregory Marte, director ejecutivo de la Asociación Dominicana de Avicultores; Pedro Musa, director de Relaciones Públicas de Confenagro, entre otros.