La Romana. – La empresa Central Romana Corporation anunció que recibió la certificación en materia de responsabilidad social y sostenibilidad medioambiental bajo el estándar PROTERRA, logrando calificar bajo el sello de calidad un alcance que incluye la producción de azúcar de caña y sus derivados.
El ingenio Central Romana “ha demostrado su habilidad para implementar, monitorear y trazar una producción responsable y sostenible de sus actividades agrícolas en cada etapa” según establece el certificado del estándar PROTERRA.
Entre los parámetros que establece la certificación está la prohibición del uso de organismos modificados genéticamente, conocidos como GMO’s por sus siglas en inglés.
De acuerdo con la información difundida por la compañía, el proceso de auditoría para lograr el estándar PROTERRA tuvo una duración de siete días e incluyó el área industrial del ingenio, las plantaciones propias de caña del Central Romana, y los colonos azucareros o proveedores externos.
Se practicaron visitas a cada lugar de interés para garantizar el manejo efectivo de la biodiversidad, vegetación natural y de los servicios ambientales; manejo efectivo de los residuos y de la contaminación; manejo y conservación del agua; manejo eficaz de los gases de efecto invernadero y de la energía, así como el análisis de documentaciones y evidencias, y entrevistas en espacios de trabajo.
"Esta importante certificación demuestra una vez más cómo el Central Romana cumple debidamente con todos los estándares y leyes laborales nacionales e internacionales en el área de responsabilidad social", destacó la empresa.
En la información enviada a la prensa, la compañía expresó su gran satisfaccion de haber logrado esta certificacion por una organización de tanto prestigio internacional como lo es PROTERRA, responsable de certificaciones similares aquí y en otros países del mundo.
“Compartimos este logro con todos nuestros empleados, trabajadores y relacionados” dijo el Consejo de Administración de Central Romana.
Central Romana Corporation inició sus operaciones en el año 1912 en La Romana, en la zona Este de República Dominicana. Su actividad principal es la siembra de caña y la producción de azúcar en sus más de cien años de fundación. A través de las décadas, ha logrado diversificar sus inversiones económicas en el desarrollo de áreas tan diversas como: ganadería, zonas francas, materiales de construcción, procesamiento de productos cárnicos y lácteos, salud, operación de puerto y aeropuerto, bienes raíces, y turismo.