Roma, 20 jul (EFE).- El bosque boreal ofrece una serie de alternativas para mitigar los efectos del cambio climático, por lo que debería recibir más atención a nivel internacional, indicaron hoy en Roma diversos expertos.
El especialista de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) Lars Marklund destacó que los bosques boreales, ubicados principalmente en el norte de América, Europa y Asia, son importantes sumideros de carbono, al absorber más de lo que liberan.
"Hay potencial para aumentar el área forestal y los niveles de los sumideros mediante planes de gestión sostenibles", apuntó Marklund, durante un evento celebrado hoy en la FAO sobre cambio climático.
Además, recordó que casi el 90 % de esos bosques está sujeto a algún plan.
El bosque boreal, que junto con el de las zonas templadas abarca el 48 % de la superficie forestal mundial, aumentó su extensión entre 2000 y 2015 debido a la reforestación a gran escala, según datos de la FAO.
Rusia, que alberga el 20 % de todos los bosques del mundo (la mayoría boreales) y se ha comprometido a reducir en un 75 % sus emisiones de carbono para 2030, ha conseguido aumentar su cubierta forestal en el último medio siglo, pero sigue afrontando problemas como la conversión de esas tierras en cultivos agrícolas y los incendios
Para mitigar el cambio climático, la madera de esos ecosistemas también se puede destinar a la generación de energía en sustitución de los combustibles fósiles, así como emplearse para crear productos madereros que después siguen almacenando el carbono de los árboles, como son los materiales para la construcción de edificios.
Como sumideros, por ejemplo, en una década los bosques europeos han secuestrado 13.000 millones de toneladas de carbono, lo que podría reportar 130.000 millones de dólares en el mercado internacional, según cálculos de la ONU.
Además, Roman Michalak, de la Comisión Económica de Naciones Unidas para Europa, llamó a proteger la diversidad biológica y fomentar el empleo en el sector forestal, el cual ha retrocedido recientemente en esa región en parte por la crisis económica.
El director de Política Forestal de Rusia, Andrey Gribennikov, instó a ampliar los esfuerzos para proteger los bosques boreales a nivel internacional a partir del Acuerdo de París frente al cambio climático suscrito el año pasado.
Rusia, que alberga el 20 % de todos los bosques del mundo (la mayoría boreales) y se ha comprometido a reducir en un 75 % sus emisiones de carbono para 2030, ha conseguido aumentar su cubierta forestal en el último medio siglo, pero sigue afrontando problemas como la conversión de esas tierras en cultivos agrícolas y los incendios.
El experto de la Oficina del Ambiente de Suiza Christian Küchli dijo, por su parte, que hace falta "reforzar la posición de los bosques" en las negociaciones relacionadas con el clima.
Küchli aseguró que en su país, típicamente de montaña, el cambio climático está impactando fuertemente con fenómenos extremos como tormentas, y de forma más gradual en las especies de árboles "sensibles", que están desapareciendo o creciendo a mayor altura. EFE