En un duelo entre dos de los lanzadores más dominantes en el campeonato de béisbol invernal dominicano, el zurdo cubano Raúl Valdés mostró su calidad desde el montículo, para superar al ganador de la triple corona de picheo, César Valdez y los Gigantes del Cibao, mantuvieron su invicto en la semifinal, al derrotar por blanqueada 3-0 a los Tigres del Licey, este martes en el estadio Quisqueya Juan Marichal.
Valdés (1-0) se recuperó de una rara primera entrada, en la que otorgó tres bases bolas, para lanzar 5.1 episodios en blanco, de dos hits y seis ponches, para demostrar las razones por la cual fue elegido en el primer turno del Draft de Reingreso por el equipo de San Francisco de Macorís (noroeste).
El zurdo cubano no tuvo su mejor noche en cuanto al control de la zona de strike, otorgando cuatro transferencias, pero se las arregló para sacar out en el momento clave, evitando que los Tigres pudieran dañarle y dándole la segunda victoria en dos partidos a los Gigantes.
El ataque de los ganadores se presentó a la altura de la cuarta entrada, cuando con dos outs y corredores en primera y segunda, Carlos Peguero disparó un doble al prado derecho que llevó la primera vuelta de los Gigantes.
Los potros volvieron al ataque en el quinto episodio, cuando el inicialista cubano Henry Urrutia disparó un largo cuadrangular por el jardín derecho, sin compañeros en circulación para colocar el marcador 2-0, en favor de los dirigidos por el colombiano Luis “Pipe” Urueta.
Los visitantes volvieron al ataque en el séptimo, cuando luego de un triple de José Siri abriendo el capítulo, Harser Alberto conectó un elevado de sacrificio al jardín central.
Por su parte el abridor de los azules, ganador del premio al Jugador Más Valioso y Lanzador del Año en la serie regular, César Valdez (0-1), le brindó una nueva presentación de calidad a los dirigidos por José Offerman, al completar 6.1 entradas, de tres carreras y cinco ponches, pero cargó con la derrota.
La ofensiva de los añiles, quienes no aprovecharon el descontrol del zurdo de los Gigantes para anotar en la primera entrada, volvió a amenazar en el octavo capítulo, cuando colocaron dos hombres en las bases, con dos fuera, bateando Yermin Mercedes, quien había remolcado tres carreras en el primer juego de la semifinal, pero en esta ocasión falló con elevado a la inicial, para terminar con la amenaza de los felinos.
Estrellas contra Águilas
En Santiago (norte), Junior Lake ejecutó un toque a la perfección y provocó un error en tiro del lanzador Brandon Brosher, lo que abrió las puertas para que las Estrellas Orientales derrotaran entradas extras 4-2 a las Águilas Cibaeñas, en el estadio Cibao.
Con el partido empatado a dos carreras, en la decimosegunda entrada y con dos corredores en las bases, Lake realizó un toque hacia el lado izquierdo del terreno, que tomó Brosher (0-1), quien realizó un tiro desviado, que no pudo detener el inicialista y que permitió que los elefantes tomaran la delantera en el partido 3-2.
Las Estrellas sumaron una más en el episodio, por elevado de sacrificio al jardín izquierdo de Meibrys Viloria, que llevó al plato a Robinson Canó.
Los orientales tomaron la delantera en el encuentro en la primera entrada, anotando dos carreras por doble remolcador de una carrera de Lake, que provocó que Canó, quien estaba en las bases, también anotara por error defensivo.
El picheo verde mantuvo a raya a los amarillos hasta el séptimo episodio, cuando Melky Cabrera conectó jonrón por el jardín izquierdo para los cibaeños, que empatarían las acciones en ese mismo capítulo, por sencillo productor de Luis Valenzuela.
Las Águilas colocaron corredores en primera y segunda en la novena, pero Fernando Rodney obligó a Ramón Torres a batear un rodado para doble eliminación, manteniendo la pizarra igualada a dos carreras, llevando el partido a entradas extras, donde los dirigidos por Fernando Tatis lograron la victoria.
Con el resultado de este martes, los Gigantes (2-0) dominan la semifinal, seguido por Tigres (1-1), Estrellas (1-1) y Águilas (0-2)-
En la jornada de este miércoles los Tigres reciben a las Águilas, en Santo Domingo y los Gigantes a las Estrellas, en San Francisco de Macorís.