Madrid, 10 jun (EFE/Salomón Rondón).- Salomón Rondón, jugador venezolano que milita en el West Bromwich Albion inglés, ofrece su visión del Mundial de Rusia, un país que conoce bien después de sus tres años de estancia:
"El Mundial más abierto y en un país que me trae gran recuerdo Todavía recuerdo la ilusión que se vivía en Rusia. Durante tres años formé parte del Rubin Kazán y del Zenit de San Petersburgo, días en los que la organización del Mundial de fútbol flotaba en el ambiente.
El presidente explicaba emocionado el prototipo de estadios que deseaba construir, cómo iba a evolucionar el país y las expectativas que implicaba ser la sede de este gran evento para la sociedad, el turismo y la economía. Hoy, es una realidad.
Las instalaciones son una maravilla, aunque tal vez los largos desplazamientos sean su único punto negativo. Sin embargo, saben que es una oportunidad única para darse a conocer a nivel mundial.
Por eso, su fútbol ha ido puliéndose poco a poco para ser competitivo en esta Copa del Mundo. De hecho, potenciaron a los jugadores nacionales en su liga hasta el punto de establecer una norma para que solo pudiesen alinearse cinco jugadores extranjeros en la cancha cada partido.
El resto son locales, ya que no son demasiados los futbolistas conocidos que hayan salido de su país, como Arshavin, Pavliuchenko o Kerzhakov. Desde que finalizó la pasada edición en Brasil, han optado por reforzar su estilo, y se ha notado.
Al margen, Colombia es una de mis favoritas. Los conozco bien de la Copa América y las eliminatorias para el Mundial, y creo que puede llegar lejos porque tiene muy buenos jugadores, cuenta con figuras como James y Falcao, y también con experiencia. Defensiva y ofensivamente son potentes, con jóvenes de nivel, pero sobre todo dispone de un sello propio porque no tienen complejos
Sin embargo, en mi caso me llevó rumbo a la Premier League en busca de nuevos retos.
Mi experiencia en Rusia fue muy intensa. Descubrí que allí se vive el fútbol con pasión, y desde que estoy en Inglaterra, siento que se pueden comparar en que son muy amantes de sus equipos y mueven una gran masa de personas cada vez que hay partido. Son seguidores que adoran a Rusia, son muy nacionalistas y creen en sus jugadores. Será un rival a tener en cuenta.
De hecho, al margen de los candidatos típicos, de esos cuatro o cinco países que estarán en las quinielas de todos, es el Mundial más abierto que recuerdo. Las nuevas generaciones marcarán la diferencia. Estoy seguro. Será un torneo más competitivo, hay más cualidades, más calidad, más preparación. Será más igualado.
Desde mi punto de vista, la clase media, si se me permite la expresión, será la que destaque.
Bélgica, Islandia, Irán, Corea del Sur, Colombia… La prueba es que, cuando se trabaja mucho tiempo con un grupo, como ocurre con uno de los favoritos, Brasil, que cuenta con Neymar y Coutinho, que se conocen de toda la vida, se nota. Jugadores como el egipcio Mo Salah, el surcoreano Son Heung-min, el islandés Gylfi Sigurdsson o el iraní Sardar Azmoun, entre otros, llamarán la atención por su gran talento.
Pongo otros ejemplos: Costa Rica está haciendo las cosas bien desde hace tiempo, sabe qué es un Mundial y quiere llamar la atención. Para Panamá será su primera actuación y eso les motivará, mientras Perú, que cuenta con la experiencia de Paolo Guerrero, su referente en ataque que finalmente podrá jugar, o del conocido Farfán.
Al margen, Colombia es una de mis favoritas. Los conozco bien de la Copa América y las eliminatorias para el Mundial, y creo que puede llegar lejos porque tiene muy buenos jugadores, cuenta con figuras como James y Falcao, y también con experiencia. Defensiva y ofensivamente son potentes, con jóvenes de nivel, pero sobre todo dispone de un sello propio porque no tienen complejos. Osorio es la conexión colombiana con México, quien cuenta con este seleccionador al frente, aunque deberá atravesar uno de los grupos más complicados con un inicio duro frente a la actual campeona, Alemania.
Luego está Argentina, aspirante al título a pesar de que sufrió en la fase de clasificación. Pero tiene a Leo Messi y eso marca la diferencia. Junto a Francia puede ser una de las que rompa los esquemas, aunque no se quién liderará ese grupo.
Sin ir más lejos, Neymar será el líder de Brasil, llevará a sus compañeros como hizo en los Juegos Olímpicos. También tenemos a España, con Andrés Iniesta y Sergio Ramos, quienes manejan el vestuario y eso es básico en los seis partidos que dura la Copa del Mundo. Y cuidado con Bélgica, que es emergente y lleva tiempo firmando un gran fútbol. Es más, creo que veremos un nivel elevado. Y eso hará que todos disfruten de este Mundial. Sean de una selección u otra. EFE