Redacción Deportes.- La 36ª Copa América, que se disputará en Auckland (Nueva Zelanda) de enero a marzo de 2021, entra en la fase decisiva de preparación de los equipos, con la botadura de la segunda generación de los monocascos AC75, que pueden cambiar todo lo visto hasta ahora en la vela de alta competición.

En estos momentos tanto los desafiantes, el INEOS UK británic, el American Magic estadounidense y el Luna Rossa italiano, como el defensor del título, el Emirates Team New Zealand, entrenan con los AC75 de primera generación.

Se espera que tanto en la Serie Mundial, que se disputará también en Auckland del 17 al 20 de diciembre, como en la Prada Cup o torneo de desafiantes del que saldrá el retador del defensor, que se celebrará del 15 de enero al 22 de febrero, ya se competirá con las unidades de segunda generación.

Precisamente fue en Nueva Zelanda cuando la vela de alta competición dio un giro espectacular cuando un catamarán de 72 pies (21,95 metros de eslora) 'volaba' materialmente en el golfo de Hauraki. El Emirates Team New Zealand había traído 'foiling' (navegar con alerones) a la Copa América y cambiando para siempre las competiciones de alto nivel,

Desde entonces, el aumento en el rendimiento de las embarcaciones de la Copa América ha sido mayor que en cualquier momento en los 170 años de historia del evento.

Seis años más tarde, en 2018, la publicación de la regla de la clase AC75 marcó el comienzo de una nueva era de la navegación. Hoy en día los 'foils'(alerones) son comunes, pero las técnicas de ingeniería y navegación necesarias para que el AC75 'vuele' son completamente diferentes de cualquier cosa que se ha visto antes.

Para empezar, el AC75 es tiene una eslora mayor: 75 pies (22,90 metros) y una manga de 16 pies (4,90 metros), pero también es ligero, lo que es vital, porque el AC75 está diseñado para 'volar' (navegar por encima de la superficie del agua)

También hay un nuevo concepto que eleva la embarcación: el Foil Cant Arms (alerón con brazo movible) se mueve debajo o fuera del agua para proporcionar al barco para proporcionar el apoyo que necesita para mantenerse elevado.

Algunas partes del AC75 como el tubo del mástil, el aparejo, los brazos de los alerones y su sistema hidráulico son todos componentes comunes. Sin embargo, todavía hay una serie de áreas con las que los diseñadores pueden experimentar para encontrar una ventaja ganadora de las carreras.

Una nueva evolución de esta Copa América es la vela mayor de dos pieles. Esta doble vela se combina con el mástil para formar un ala, generando la potencia que el AC75 necesita para elevarse y ganar velocidad.

El sistema de alerón móvil es una nueva tecnología, una unidad de potencia hidráulica impulsada por baterías que suministram la energía para levantar y bajar los brazos de aluminio inmensamente fuertes y pesados.

A medida que el barco empieza a virar, el sistema móvil se activa, colocando un alerón hidroeléctrico en el agua, y levantando en otro, donde su peso se convierte en lastre.

Al final de los brazos de los alerones se encuentran las armas secretas de los equipos – las alas de aluminio. Aparte de las reglas básicas que rigen las dimensiones y el peso, se trata de un territorio abierto para los diseñadores y cada equipo les ha dado una forma distinta. Algunos han tomado forma de cola de ballena y otros de alas de gaviota, configuraciones distintas y revolucionarias. EFE