El botín dorado la obtuvo Ranarkys Durán, experto atletas de las artes marciales de 41 años de edad, quien por demás lideró a la representación dominicana en la actividad que fue realizada por la Federación Internacional de Jiu-jitsu Brasileño.
Los 32 atletas de la disciplina de combate tipo brasileño que acudieron a la cita pertenecen a las escuelas Fight Training Academy (FTA) y Machete BJJ, lograron 12 medallas diseminadas entre plata y bronce, constituyendo el oro de Durán la de mayor significado.
"Con los buenos resultados obtenidos en el Miami Open de Jiu-jitsu Brasileño la República Dominicana le fue extremadamente bien en esa competencia internacional, y le fue bien tanto en femenino como en masculino, por lo que quedó bien posicionada en este deporte a nivel internacional", dijo Ranarkys Durán en conversación exclusiva con reporteros de acento.com.do.
Significó que el éxito logrado está basado en el entusiasmo con la práctica de Jiu-jitsu Brasileño y a esto "le agregamos que tenemos buena base deportiva y los profesores e instructores están bien preparados".
Añadió que, "la disciplina deportiva está creciendo bien rápido y ya tenemos muchas personas están encantada con Miami Open de Jiu-jitsu Brasileño, sobre todo por lo dinámico y su filosofía con que se ejerce".
"Te informo que cuando vamos a competencia internacionales, el país obtiene buenos resultados pues nuestro atletas logran grandes triunfo y por demás son reconocidos, esto se debe a que se asume este deporte con mucha responsabilidad y los mismo profesores están bien preparados", dijo el laureado deportista.
Ranarkys Durán opinó que el Jiu-jitsu Brasileño posee muchas facilidades en las prácticas, "es un deporte donde los atletas no se maltratan y la que la vida útil de los deportistas es bastante prolongada, no es como los demás deportes de contacto donde los deportistas tienen que golpearse y en esta disciplina lo que impera son los derribo y las sumisiones".
Explicó que el estilo es muy parecido al judo tradicional que comienza desde arriba, "pero el Jiu-jitsu Brasileño se diferencia en que cuando yo tumbo me cuenta a mi favor dos punto, es decir que no se acaba la pelea ahí y sigue hasta que llega a la sumisión o se acabe el tiempo. En las decisiones de un combate son por sumisión, decisión de un juez o por puntos".
La facilidad del Jiu-jitsu Brasileño es que para ir a una competición no hay una eliminatoria mundial, yo cuando fui al torneo donde gané oro, no participé en eliminatorias, simple y llanamente uno se inscribe y participa, añadió.
Sus inicios
Ranarkys Durán comenzó en la disciplina de Jiu-jitsu Brasileño en el 2002, a los 27 años y en las artes marciales a los 13 años de edad. Casi toda una vida vinculado a las artes marciales.
Su mayor logro – contó- ha sido mantenerse en la práctica de las artes marciales, en ese sentido significó que, "en todo este tiempo he visto como muchos de mis compañeros han tenido que salirse por determinado tiempo y cuando vuelven no son los mismos y esto les ha afectado en su carrera".
Explicó entusiasmado que, "en la escuela de Jiu-jitsu Brasileño nuestros alumnos se retiran por diversas razones y lograr mantener un buen grupo es un reto, pero en lo particular conservar el espíritu y disciplina de este deporte es un logro".
"A todo estos se le agregan los triunfos que se van obteniendo por la perseverancia y la conducta que le aplicamos a esta hermosa rama deportiva, todo porque creemos en lo que hacemos, es par mi el logro más grande, todo esto lo digo independientemente de las medallas por encima de cualquier otra cosa, es decir que la disciplina de mantener y seguir hacia delante".
Refirió que el Jiu-jitsu Brasileño tiene mucho futuro en el país y "nos falta un poquito más de unión en las escuela donde se practica. Para que entiendan lo que digo, recientemente se realizaron competencias nacional y varias escuelas no asistieron, los motivo se respectan, pero sin no van a los torneos, este deporte no va crecer lo suficiente, lo cual significa que no tendremos la posibilidad de desarrollar nuevos y mejores atletas y así no se podrá construir el relevo, por ejemplo yo tengo 41 años y en dos años ya estaré diciendo adiós a las competiciones".
"Aspiro a ser campeón mundial, aunque tengo 41 años, entiendo que como atleta de alta competición me quedan dos años y en este tiempo debo de convertirme en campeón mundial. El espíritu y la disciplina la tengo para esos fines", señaló.
El próximo compromiso que le espera al equipo completo de Jiu-jitsu brasileño, es el Torneo Panamericanos en el mes de marzo del 2015, el Open de New York y luego el Mundial de Jiu-jitsu brasileño. Es en esta actividad donde aspira a convertirse en campeón mundial.
Explicó que este deporte tiene la ventaja que para clasificar no hay que ir a eliminatoria, "lo que sí existe es el ranking de acuerdo a las participación que va obteniendo en las actividades y por medio a ellas obtiene posición a escala mundial. El ranking lo realiza la Federación Internacional de Jiu-jitsu Brasileño".