PORTO ALEGRE, Brasil.- Antes de que el coronavirus obligara a suspender las competiciones deportivas, jugadores brasileños suspendieron el respeto mutuo en la ciudad de Porto Alegre, en un estadio repleto.
Gremio e Internacional pactaron anoche un 0-0 en la disputa de la Copa Libertadores de América, un clásico gaúcho manchado por la expulsión de ocho jugadores, cuatro por bando, sobre el final del encuentro por agresiones mutuas.
Considerado como el clásico de más rivalidad de Brasil, el 'Grenal' número 424 de la historia, el primero que se disputaba en la Libertadores, tuvo todos los ingredientes de un gran clásico: tensión, peleas, expulsados y más garra que buen fútbol, algo que quedó plasmado en el marcador final.
Los nervios afloraron en el minuto 85, cuando Moisés y Pepé se encararon y provocaron una espectacular pelea que terminó con ocho tarjetas rojas.
VEA AQUÍ EL VIDEO del masivo intercambio de golpes.
Los dos archirrivales de Porto Alegre lideran con 4 puntos la zona tras dos jornadas, seguidos por el América de Cali, con 3, y la Universidad Católica de Chile, en blanco.
La trifulca entre los dos equipos de Porto Alegre paró el encuentro por doce minutos y produjo la expulsión de Edenílson, Moisés, Víctor Cuesta y Bruno Praxedes, de Internacional; así como de Luciano, Pepe, Caio Henrique y Jonathan Doin, de Gremio.
Hombres de la Policía Militar debieron intervenir para disolver la tensión entre los miembros de los dos banquillos.