SEVILLA, España.- Un minuto de silencio en memoria de todas las víctimas de coronavirus precedió al pitido inicial del Sevilla-Betis que reanudó la Liga española en el Sánchez-Pizjuán, donde esos sesenta segundos, con sólo una música religiosa de fondo, se convirtieron en el gesto simbólico más 'sonoro' y emotivo en un estadio vacío.
Con una imagen insólita para un derbi, sin aficionados en las gradas por las medidas de seguridad sanitaria contra la COVID-19, el minuto de silencio fue sepulcral: no se oyó nada, ni el revoloteo de los pájaros.
En señal de respeto y recuerdo a las víctimas, los jugadores del Sevilla y del Betis, junto con el trío arbitral, formaron juntos en el círculo central del campo, los de un equipo frente a los del otro.
Frente al bullicio y la animación consustanciales al derbi entre los eternos rivales sevillanos, se vivió ahora una escena impactante, impresionante en un estadio donde se 'escuchó' el silencio convertido en el sonido más sonoro y fuerte, como ocurre en momentos cumbre en la plaza de toros de La Maestranza o en estampas sentidas de la Semana Santa hispalense.
En el videomarcador se proyectaron dos imágenes: una con un escudo del Sevilla con crespón negro y una leyenda de recuerdo a las víctimas de la COVID-19, y otra del legendario jugador sevillista Marcelo Campanal, fallecido el pasado 25 de mayo.
EL PARTIDO Y LOS GOLES
Tras ello llegó el triunfo sevillista (2-0) liderado por el argentino Lucas Ocampos, cuyo equipo expuso más que el verdiblanco y que vio la luz en la segunda parte.

El conjunto que entrena Julen Lopetegui consolida así su tercera plaza en la clasificación con los goles de Ocampos, de penalti, y del brasileño Fernando Reges, tras un pase de tacón del argentino.
La derrota deja al equipo de Joan Francesc Ferrer 'Rubi' sin reaccionar en la zona media de la clasificación, y más después de un partido en el que solo apretó en la última fase y ya con dos tantos en contra.
Lopetegui, quizás con la novedad de que ahora se puede hacer hasta cinco cambios, puso una alineación con algunas novedades.
Lo primero fue que Ocampos, que arrastraba unas molestias físicas esta semana, finalmente entró en el once, en el que también estuvo en la zona ofensiva Munir El Haddadi y Óliver Torres. Aguardaron a su oportunidad el argentino Éver Banega y su compatriota Franco 'Mudo' Vázquez.

Rubi también sorprendió en su alineación, en la que no estaban jugadores como el central argelino Aïssa Mandi, el centrocampista mexicano Andrés Guardado, el extremo Joaquín Sánchez o el goleador del equipo, Loren Morón, y sí otros como el brasileño Sidnei da Silva, Carles Aleñá, Cristian Tello y Borja Iglesias.
Pese a que el Betis hizo una presión muy adelantada en el inicio para dificultar la salida del rival, el Sevilla quiso asumir su condición de loca.