ROMA, Italia.- El Nápoles, rival del Barcelona en la Liga de Campeones, planea reanudar sus sesiones de entrenamiento el próximo 23 de marzo, después de varios días en los que futbolistas estuvieran confinados en sus casas a causa de la epidemia del coronavirus.
"SSC Nápoles comunica que el equipo reanudará el lunes 23 de marzo los entrenamientos en el centro deportivo con una sesión por la mañana", informó el equipo napolitano en un comunicado oficial en página web.
El técnico del Nápoles, Gennaro Gattuso, dirigió el pasado viernes su última sesión de entrenamiento en el centro deportivo de Castel Volturno y el club los interrumpió a continuación a causa de la emergencia por el coronavirus, que ya ha causado más de 2.000 muertos en Italia.
Pese a que ya la semana pasada muchos equipos italianos suspendieran sus entrenamientos, el Nápoles siguió citando a sus jugadores pues todavía no había sido aplazada la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones contra el Barcelona en el Camp Nou.
Los jugadores napolitanos recibieron indicaciones del cuerpo técnico sobre los ejercicios a realizar en sus viviendas y Gattuso planea volver a trabajar en equipo a partir del próximo lunes.
De momento, el Gobierno ordenó el cierre de todos los negocios, excepto farmacias y supermercados, en el intento de reducir los contagios.
El Inter cuida alimentación de sus jugadores con comidas a domicilio
Pese a la emergencia por el coronavirus, que confinó a los italianos en sus casas para frenar los contagios, el Inter de Milán sigue cuidando la alimentación de sus jugadores con entrega de comida a domicilio, además de los "deberes" atléticos con los que su plantilla debe cumplir desde sus viviendas.
Y pese a que esté permitido salir para comprar comida, el Inter del técnico Antonio Conte, un entrenador obsesionado por la perfección y la atención a los detalles, se encarga cada día de enviar almuerzo y cena personalizados para sus jugadores.
Para los clubes es fundamental que sus futbolistas mantengan el estado de forma atlética para llegar listos cuando sea posible reanudar las competiciones nacionales e internacionales, que se encuentran suspendidas hasta al menos el 3 de abril a causa del coronavirus.
El nutricionista del Inter, Matteo Pincella, se encarga de establecer los platos que los futbolistas interistas deben comer a diario y los envía a domicilio desde la cocina del centro deportivo de Appiano Gentile, tal y como se aprecia en unas fotos compartidas por el centrocampista Nicoló Barella en sus redes sociales.
En particular, el volante sardo recibió una caja de pasta con salsa de tomate y unas hamburguesas de pollo para el almuerzo, mientras que su cena previó una pasta integral y carne, además de una ensalada de aguacate.
Algunos de los alimentos recibidos llevan además indicaciones sobre cómo deben ser preparados o si deben calentarse en el microondas.
Cada uno de los futbolistas sigue con su propia dieta a la espera de que se acabe la emergencia y de que pueda volver a trabajar, y comer, en el moderno centro deportivo Suning de Appiano Gentile, a unos 40 kilómetros de distancia del centro de Milán.
El propio nutricionista Pincella compartió en su cuenta de Instagram una foto con las varias cajas de comida listas para ser entregadas a los jugadores, acompañada por el mensaje: "¿Coronavirus? No problem. Comida a domicilio para los jugadores".
Además, los futbolistas del Inter deben encargarse de mantenerse en forma con entrenamientos alternativos en sus viviendas, con ejercicios atléticos y de pesas.
El centrocampista croata Marcelo Brozovic y el defensa eslovaco Milan Skriniar, que están viviendo la cuarentena juntos, compartieron en sus redes sociales una foto en la que se les aprecia trabajando con bicicleta y cinta para correr.
Abdominales, flexiones, sentadillas y ejercicios con pesas son otras recomendaciones a seguir en este período para mantener la forma, a la espera de que puedan volver a trabajar con el balón en el terreno de juego.
De momento, el fútbol italiano se encuentra suspendido hasta al menos el 3 de abril como medida de precaución para la difusión del coronavirus, que ya ha provocado 2.158 muertos y más de 27.980 contagiados, según los últimos datos oficiales de la Protección Civil. EFE