NUEVA YORK.- El cubano Kendrys Morales, que cubría la primera base y también destacaba como bateador designado, anunció su retiro del béisbol profesional con 36 años y después de trece temporadas en las que militó en siete equipos.
El pelotero cubano registró un promedio combinado de .194 con dos 'jonrones' en 201 apariciones en el plato jugando para los Atléticos de Oakland y los Yanquis de Nueva York la temporada pasada. Esta última novena lo liberó en julio.
Morales dijo que haber tomado la decisión no había sido fácil, pero consideró que su carrera ya había concluido.
Dijo que desde que vivía en Cuba ha estado jugando béisbol, y que por ese motivo se había alejado de su familia.
Añadió que espera poder recuperar el tiempo perdido con su familia.
Dijo que además actualmente en las Grandes Ligas quizá los jugadores veteranos como él no son valorados, por lo que insistió en que este es el momento adecuado para su retirada.
Morales desertó de Cuba en 2004, dijo que su octavo intento de abandonar el país, y ese mismo año firmó un contrato de seis temporadas y tres millones de dólares con los Angelinos de Los Ángeles.
En su primera temporada completa en las Grandes Ligas, en el 2009, bateó 34 'jonrones' con 108 impulsadas y tuvo promedio de bateo de .569.
Uno de los momentos que más se recuerdan de él, fue cuando en el 2010, pegó grand slam contra los Marineros de Seattle, y cuando se acercaba al plato para celebrar con sus compañeros de equipo, brincó y se deslizó por el campo, provocándose fractura en la pierna derecha.
Morales se perdió el resto de esa temporada, y la siguiente, mientras se recuperaba de la lesión.
El pelotero cubano también jugó para los Marineros, los Reales de Kansas City, los Mellizos de Minnesota y los Azulejos de Toronto, y ganó un título de Serie Mundial con los Reales en el 2015.
Morales da por terminada su carrera con 213 'jonrones', 740 carreras impulsadas y un promedio de bateo de .265. EFE