SANTO DOMINGO, República Dominicana.- “Tráiganme ahora a Nadal y al mismo Djokoic”, los dos mejores del planeta, diría el tenista del cono sur Nicolás Jarry Fillol si fuera irreverente.
El chileno Jarry Fillol, 81° en el escalafón mundial, entró por la ventana en el torneo Conde de Godó de Barcelona, debido a que lo hizo en calidad de ‘perdedor afortunado’: sustituyó al surcoreano Heyon Chung, lesionado a última hora.
Ya adentro, la segunda mejor raqueta de Chile le ganó el lunes al dueño de casa, el barcelonés Marcel Granollers, quien inicialmente le había dado un portazo en la cara al eliminarlo el domingo, horas antes de producirse la lesión del surcoreano Chung.
Superado el dueño de casa, Jarry fue este martes por el alemán Alexander Zverev, quien ocupa la tercera posición del escalafón mundial por encima del suizo Roger Federer y solo por debajo del español Rafael Nadal y del N° 1, el serbio Novak Djokoic.
Jarry Fillol incluso estuvo hoy a un punto de ser otra vez eliminado, pero se salvó de forma milagrosa de los dos “mach point” que tuvo a su favor el alemán Zverev, quien finalmente fue víctima de “muerte súbita” (’tie-break') en el tercer y definitivo set.
"Desde el fondo Zverev no estaba jugando a nada, por eso en el tercer set se vio que yo tenía el control. Estaba buscando mi error y no lo consiguió. La clave fue neutralizar su servicio y atacarle el segundo saque. Creo que eso me dio mucha ventaja", explicó.
"Estoy tratando siempre de tomar el control del punto y lo puedo hacer contra cualquiera, eso lo tengo claro. Muchas veces no resulta, sé que no va a resultar, pero cuando estoy tranquilo y con la cabeza centrada se pueden hacer muchas cosas como las de hoy", señaló el chileno, nieto de Jaime Fillol, que disputó la final de la Copa Davis en 1976, dos años después de obtener su mejor puesto ATP: 14.º en 1974.
Jaime Fillol posee la marca del partido y set más largo en la historia de la Copa Davis en dobles, con Patricio Cornejo, ante EEUU en 1973, que Chile ganó 9-7, 39-37, 6-8, 1-6 y 3-6 (122).
This boy's got talent 🇨🇱
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— Tennis TV (@TennisTV) April 23, 2019
OTRO CHILENO TAMBIÉN GANÓ
A la misma hora que jugaba el segundo mejor tenista chileno, la primera raqueta de ese país del Cono Sur de Latinoamérica, Cristian Garín (48°), evidenciaba el mismo buen rendimiento que la semana pasada lo llevó a conquistar el ATP de Houston.
Garín se estrenó en Barcelona con una sólida victoria sobre el eslovaco Martin Klizan (47°), por 7-5 y 6-4, en una hora y 45 minutos de partido.
El desafío que tendrá ahora por delante será aún mayor, pues este miércoles enfrentará a Denis Shapovalov (20°), quien quedó libre en la primera ronda del torneo de Barcelona.
OTROS RESULTADOS DE LA JORNADA:
El bicampeón Nishikori no da pie a la sorpresa en su debut
El japonés Kei Nishikori, campeón del Barcelona Open Banc Sabadell-Trofeo Conde de Godó en 2014 y 2015, y actual número siete del ránking ATP, avanzó a la tercera ronda del torneo barcelonés tras vencer en su debut al estadounidense Taylor Fritz (7-5, 6-2), en un partido que se alargó una hora y 41 minutos.
El cuarto cabeza de serie del Godó aún no conoce su rival en la tercera ronda, una fase que el año pasado no pudo superar al retirarse lesionado cuando se enfrentaba con el español Guillermo García-López.
El tenista nipón llega a Barcelona para recuperar sensaciones, tras caer la semana pasada en la tercera ronda del torneo de Montecarlo ante el número 49 del mundo, el francés Pierre-Hugues Herbert (7-5, 6-4).
Ferrer empieza con una plácida victoria su última participación en Barcelona
El español David Ferrer empezó con una contundente vitoria ante el alemán Misha Zverev (6-3 y 6-1) su participación en el último Barcelona Open Banc Sabadell-Trofeo Conde de Godó de su carrera.
El mayor de los Zverev apenas opuso resistencia ante el cuatro veces finalista del abierto barcelonés, que fulminó a su adversario en una hora y cinco minutos.
A sus 37 años y tras lograr 27 títulos ATP, Ferrer ha decidido retirarse esta temporada del circuito profesional. Este miércoles le espera en segunda ronda Lucas Pouille, 32 del ránking mundial, decimoquinto cabeza de serie del torneo y al que nunca ha ganado, pues los dos enfrentamientos procedentes fueron para el francés.
Si logra batir a Pouille y Rafael Nadal solventa con éxito su estreno ante el argentino Leonardo Mayer, los dos españoles se verían las caras en lo octavos de final.
Ese partido sería uno de los clásicos del torneo, ya que ambos se han enfrentado en cuatro finales del Godó, aunque la victoria siempre cayó del lado del balear.
"Me hace feliz volver a jugar en la central"
Tras ganar en su debut en el último Barcelona Open Banc Sabadell-Trofeo Conde de Godó de su carrera, Ferrer aseguró que físicamente se siente bien y que le hace "feliz" haberse ganado la posibilidad de jugar de nuevo en la pista central este miércoles.
"Me siento bien, la verdad que es lo que quería. Perder contra los mejores jugadores posibles. Mañana jugaré contra Pouille en la pista central, y eso me hace feliz.
Por jugar en la central y por hacerlo contra un jugador de esas características", explicó Ferrer después de derrotar al alemán Zverev.
"Intento aparcar las emociones y centrarme en cada partido y en cada punto, y vivirlo al máximo. Intento no pensar en ello, en que es mi último Godó. Disfrutar esta victoria, descansar y alimentarme bien y mañana afrontarlo con las máximas garantías", insistió el alicantino.
Ferrer no ocultó que le gustaría cruzar su camino por última vez con el de Rafa Nadal en el torneo, una circunstancia que podría darse en octavos de final, pero quitó importancia a esa hipótesis.
"Me gustaría, pero al salir el cuadro no lo pensé, porque para que pasara yo tenía que jugar dos partidos y Rafa uno. Yo mañana tengo que jugar contra un jugador muy bueno. Ya se verá", valoró.
Este miércoles le espera en segunda ronda Lucas Pouille, 32 del ránking mundial y decimoquinto cabeza de serie, un tenista al que David Ferrer definió como un jugador "con mucho talento", en un encuentro que será, según el español, "difícil y duro".
EFE