El mar, interminable, profundo y misterioso, ha sido de inspiración a muchos, como si sus olas fueran oxígeno para el que escribe. Los versos del poeta Bismar Galán, cargados de imágenes y sonidos, llegan hasta el lector como olas alegres; vienen “vestidos” de viento con espuma de mar.
Para nuestro autor, como nos muestra en su poemario Versos del Mar, éste no solo se trata de agua:
El mar tiene arena fina
Tiene peces, tiene sal.
Tiene estrellas, tiene barcos
Y una sonrisa de mar.
El mar tiene una sirena
Y un caballito de mar
Y en su soledad, tiene alegrías y sueño…y un sol en la mañana.
Para el poeta Galán, el mar y el cielo son como hermanos gemelos, como cuando dice:
¿Será que el mar es el cielo
o es que los dos son iguales?
En el escenario de estos versos, participan también las nubes, las golondrinas y los pájaros azules. El mar invita a los niños a que jueguen en su orilla, “abrazados con el sol”, mientras el abuelo los cuida, y los convoca a su fiesta, diciendo:
La espuma viene de mis alegrías,
de bailes y fantasías
que guardo en cofres
muy hondos.
La espuma
es como una danza
con un violín de fondo.
Y cual bailarina, su espuma “se ríe cuando asoma, flotando sin cesar.”
Versos del mar es un canto inspirado en sus olas, en sus habitantes como la caracola, y en aquellos como el barco de papel y el marinero, que osan surcar su cuerpo de agua salada.
Galán nos cuenta de sus profundidades, de las tortugas que allí tienen su hogar, y también de la sirena, el tiburón danzarín, la perla en su ostra y el pez de colores. En sus “aguas cristalinas”, “el delfín se mueve” y hasta la luna baila y se ensancha y “en cada ola se abraza”.Todos ellos, como los humanos, buscan tesoros que el mar guarda en sus baúles.
Tesoros como lo son estos versos, llenos de luz y musicalidad. Y es que, en las palabras de Bismar Galán, el mar tiene una canción, el mar es poesía.