SANTIAGO, República Dominicana.-La cuarta versión de la exposición permanente Génesis y trayectoria, dedicado a los pioneros del arte dominicano, exhibe la obra de Alejandro Bonilla: Retrato de Rafael de Marchena y de Sola, una verdadera joya de la pintura dominicana.
El crítico e historiador del arte Danilo de los Santos ha considerado a Alejandro Bonilla como “la primera figura relevante del hacer pictórico republicano, el primer pintor que se reconoce en la historia de la República Dominicana”.
El Centro León resalta que el hecho reviste aún mayor interés si se toma en cuenta que se conserva apenas una docena de las producciones artísticas de Bonilla.
Sobre el Retrato de Rafael Marchena y de Sola, explica que fue pintado en 1890, y que es un retrato al óleo de un ilustre personaje de origen judeo-holandés que se radicó en Santo Domingo durante la primera mitad del siglo XIX.
“Sintetiza de manera magistral algunos de los rasgos fundamentales del arte nacional en aquel período fundacional, sobre todo por el cruce de las influencias románticas y realistas en una factura que capta con extraordinaria fuerza el carácter del retratado.
Es decir, se trata de una obra que permite apreciar el trabajo de Alejandro Bonilla en su momento de plena madurez creadora”, precisa.
Explica que esta obra maestra del arte dominicano proviene de una colección privada y ha sido cedida en calidad de préstamo al Centro León, que con todo orgullo la ha incorporado a la entrada de Génesis y trayectoria, logrando una nueva atmósfera de sobriedad y elegancia en ese espacio.
“Allí espera esta joya centenaria al público para entablar un diálogo pleno de reconocimientos y actualidad”, expresa.