Premio Nacional de Literatura Infantil "Aurora Tavárez Belliard", 2008.

Por mucho tiempo se nos ha enseñado que hay actividades que son exclusivas para niños o niñas. La historia de Dinorah Coronado es un excelente ejemplo de cómo romper con estas normas.

En Rebeca al bate, su autora nos habla de una niña del mismo nombre que amaba jugar a la pelota, y que era muy buena cuando le tocaba el turno de usar este instrumento deportivo. Ella pertenecía a una liga infantil  y junto a sus compañeras representaba al país frente a las mejores jugadoras de otras naciones en un torneo celebrado en la ciudad de Nueva York. Llegar hasta allá era el resultado de mucha “paciencia y tiempo”,  de trabajo arduo durante las prácticas de entrenamiento. Además, las niñas contaban con el apoyo de su entrenadora, la madre de Rebeca, quien había sido miembro de un equipo durante su niñez y les “repetía que para alcanzar el triunfo se debe tener entusiasmo, dedicación y alimentarse bien”.

Dinorah Coronado narra con detalles vívidos, llevando al lector en retrospectiva, haciendo comprender el camino que hubo que recorrer antes de realizar el jonrón decisivo que les daría la victoria a la novena*.  La autora va y viene en los tiempos dentro la historia, describiendo los acontecimientos e impresiones de la protagonista y haciéndonos partícipes de los mismos. Además, ofrece detalles de los orígenes del juego de pelota con nuestros ancestros aborígenes y menciona a algunos de nuestros mejores representantes en este deporte mundial.

Esta es una historia que entretiene, inspira e instruye acerca de cómo practicar este juego de una manera comprensible para el joven lector. En otras palabras, es una historia que ha hecho un verdadero “jonrón” en la literatura infantil dominicana y va más allá, ya que los principios del trabajo, la pasión y dedicación son claves para el éxito, cualquiera que sea nuestro género o el lugar en el mapa en el que nos encontremos.

*Nombre que se le da a un equipo de béisbol.