SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La artista visual Norkelly Acosta inició sus trabajos de arte urbano, titulado “La ruta de los murales de Norkelly Acosta”, conjugando su arte con diferentes tópicos sociales, dejando una estampa que convierte una pared ordinaria en un lienzo y un legado visual e incluso histórico para la ciudad.
Norkelly Acosta dijo en un comunicado de prensa que para ella ha sido una experiencia viva donde conjuga su arte con diferentes tópicos con temas sociales, dejando una estampa que convierte una pared ordinaria en un lienzo y un legado visual e incluso histórico para la ciudad.
"Estos murales constituyen un atractivo cultural sin igual en cada zona donde se encuentran"
La artista explicó que la ruta empieza en la Zona Colonial y la calle El Conde frente a la Catedral Primada de América donde reposa un poste de luz que fue alumbrado con una obra que se llamó “Luz a Luz”, con Ana Sánchez, siendo parte de una jornada.
Las paredes de la Escuela Emma Balaguer en Sabana Perdida, también formaron parte de esta ruta junto a Visión Mundial, con el proyecto “Transitando” y “All About” de Anita Sánchez, la cual tiene un estilo único con una iconografía onírica ufana y paleta de colores muy propia, realizada con la intención de apoyar el tema de la no violencia contra los niños.
Otro mural con estilo artístico y contemporáneo es el que está ubicado en el Restaurant Once30 RD, el cuál cuenta una historia mágica que envuelve a este lugar “La puerta Roja at once30”, junto a Marova Olivas quien realizó el lettering.
“Familia Unida”, realizado en el contexto de la Bienal Marginal del Km 7 en honor a Silvano Lora. Y por último, “Yo cuido mi entorno”, donde un leoncillo inocente y mágico vigila su jardín lleno de magia.
“Mis pinturas tienen un contenido de simbología onírica, sueños lúdicos y atrae de forma sencilla la atención del observador, dramatizando algunas veces el significado sin plasmar escalas, contrastes y luminosidad, con una naturaleza estética muy personal y única”, apuntó la artista.
Norkelly Acosta manifestó que al pintar o realizar cualquier tipo de obra, ella se divierte. Sus obras tienen un discurso de alegría, lleno una simbología propia, donde la organización, los centros de interés, las profundidades, y la luminosidad pierden interés y surgen iconos originales.