SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Los cine clubes constituyen una larga y fructífera tradición en América Latina. Muchas universidades les dieron vida y formaron a sus cuadros fílmicos en ese proceso.

Algunos directores de cine famoso hicieron sus pininos viendo películas en las sesiones de los Cine Clubes.

Entre los más destacados están: Pedro Almodóvar, Robert Altman, Woody Allen, Theo Angelopulos, Michelangelo Antonioni, Ingmar Bergman, Bernardo Bertolucci, Luis Buñuel, David Cronenberg, Claude Chabrol, Atom Egoyan, Rainer Werner Fassbinder, Federico Fellini, Jean-Luc Godard, Peter Greenaway, Werner Herzog, Alfred Hitchcock, Miklós Jancsó, Jerzy Kawalerowicz, Krzystof Kieslowski, Stanley Kubrick, Fritz Lang, David Lynch, Louis Malle, Vincente Minnelli, Pier Paolo Pasolini, Roman Polanski, Alain Resnais, Arturo Ripstein, Carlos Saura, Martín Scorsese, Andrei Tarkovski, Françoise Truffaut, Luchino Visconti, Joseph von Sternberg. Orson Welles, Wim Wenders y muchos otros.

El crítico de cine uruguayo Nelson Carro acota:

"En los años veinte, desde Francia, el cineclub se propagó por el mundo. Y a su lado fueron apareciendo las publicaciones de cine, los críticos y los cinéfilos, es decir, los espectadores que veían en el cine mucho más que un pasatiempo o un espectáculo más o menos entretenido.

"Y, al mismo tiempo, el cineclub funcionó como un eficaz semillero, del que no sólo salieron espectadores y teóricos, sino incluso cineastas. Alcanza, como ejemplo, con mencionar a la “nueva ola francesa”: Jean-Luc Godard, François Truffaut, Claude Chabrol, Eric Rohmer, etcétera, cuya existencia, primero como críticos y luego como directores, sería impensable sin el antecedente de los cineclubes y la cultura cinematográfica francesa."

La República Domincana tiene tradición de Cine Clubes, desde el Cine Club Dominicano, el Cine Club Universitario de la UASD, que animaba Humberte Frias Morillo (+). el Cine Club Lumiere y el de Casa de Teatro que animaba Arturo Rodriguez Fernandez y el Cine Club Francois Truffaut, que animaba en casa de Francia Carlos Francisco Elías.

Todos los críticos de cine de aquellos tiempos, originalmente fueron del Cine Club Dominicano, que llegó a dirigir el Dr Roberto F de Castro junto a José Antonio Jansen, el inolvidable Tony.

Armando Almánzar Rodríguez, dirigía los Cine Forum en el cine independencia junto a Elías y Frías.

En los tiempos de Balaguer, se destacaron los cine forum del desaparecido Cine independencia (donde ahora opera Telemicro). Hacia los años 70, el servicio secreto de la policía estaba siempre en la puerta, pero nunca hubo incidente alguno. La policía no entendía muy bien el sofisticadolenguaje de los cinéfilos de entonces.

El llamado Cine Club estudiantil realmente nació en el Colegio de La Salle, con el Hermano Arturo. Ese esquema salió fuera de La Salle y llego a ciertos liceos y se organizó una pequeña red, que ofrecía películas y cine forum en  los cines de la desaparecida Cadena Apolo,bien en el Lido, los sábados, o en el Olimpia, también sábados en la mañana, a partir de las 10. Se terminaban hacia el mediodía.

El Liceo Vespertino Rodríguez Objío, el Colegio Don Bosco, el Centro de Estudios Padre Billini y el colegio Calazans, entre otros, formaron parte de esta red.

¿Se quiere un mercado interno para la naciente industria del cine, pero al mismo tiempo no hay prioridad para las actividades que fomenten la orientación cinematografica y el intercambio entre los cinéfilos dominicanas y dominicanos?

Había una directiva colegiada que llegaron a liderar Pedro Pablo Paredes y José David Mañón, como administrador.

El Cine Club llego a tener un local en la Calle El Conde, en el viejo Edificio Prota, en el apartamento 303.

¿Por qué se debilita la tradición de los cine clubes en la República  Dominicana?

Porque cuando aparece el ministerio de Cultura aún no existía la ley de cine. El último grito de los cine clubes lo organizó la Federación Dominicana  de Cine Clubes ( FedomCineClubes),

desde la Cinemateca Dominicana, cuando era su director general Carlos Francisco Elías.

Fue invitado por la Federación Internacional de Cine Clubes a una reunión internacional en la ciudad de Matera, Italia, en el 2006. Desde entonces esa federación de modo tímido y con falta de recursos ha podido mantener en la Quinta Domínica, el Cine Club Juan Carlos Arch, un líder argentino a quien en el cineclubismo se le llama El Quijote, por su  devoción y entrega a la causa de los cineclubes mundiales.

Hoy ese movimiento, no tiene importancia estratégica para el Ministerio de Cultura, a pesar de que la ley de cine contempla la importancia de las actividades de los cine clubes, cuya proyección debe de ser nacional.

Una de las paradojas de este tema: ¿Se quiere un mercado interno para la naciente industria del cine, pero al mismo tiempo no hay prioridad para las actividades que fomenten la orientación cinematografica y el intercambio entre los cinéfilos dominicanas y dominicanos?

Los cine cubes son una fraternidad de personas que  quieren ver buen cine y que se reúnen con el entusiasmo que provoca discutir, debatir una buena película, no importa su nacionalidad.