MONTREAL, Canadá- Promover el país como destino turístico en Canadá, país que en 2018 envió en 2018, 904,460 , contratando 80,526 habitaciones hoteleras, utilizando el plato de miel que es la cultura dominicana, no es una tarea sencilla pero mucho es lo que ha logrado.
La tarea la ha desarrollado en base a una estrategia de mercadeo profesionalmente elaborada y que tiene en estos días como expresión en desarrollo la Primera Muestra de Cine Dominicano.
Pero ya antes hubo otras acciones que recorren el deporte de alto impacto (golf y Hockey sobre hielo), el atractivo de la gastronomía con el sancocho como buque insignia y el rítmico manjar de y ahora el cine.
La Muestra de Cine incluye tres películas del nuevo rostro de nuestra industria: Juanita (Leticia Tonos, comedia), Hay un país en el Mundo (documental de José Enrique Pintor) y el drama emotivo Colours (Luis Cepeda, todas con funciones a casa llena en el auditorio de recinto de la Universidad Nacional Autónoma de México en Ottawa.
La organización ha estado por parte de Embajada dominicana y la oficina de Mitur, a cargo de Cosette García y un equipo de profesionales, puso a bailar merengue, en marzo pasado a los canadienses asistentes al partido de Hockey entre los Montreal Canadiens con los Red Wings de Detroit Los espectadores pudieron bailar a ritmo de merengue, admirar proyecciones únicas en las pantallas del recinto deportivo.
Las acciones culturales de promoción cumplen ha al menos cuatro anos, cuando en diciembre de 2015, se desarrolló una preentacion, inesperada para el público canadiense, en una de las principales plazas de Montreal con un equipo de bailarines de bachata (La malquerida) y merengue de Los Rosario Moviendo las Caderas (con la dirección artística de Domingo Alcalá demanda esfuerzos continuos por parte de la Oficina de Turismo en esta ciudad y que ahora utiliza la impecabilidad del “nuevo cine dominicano” tras incidir, además entre los canadienses con eventos de gastronomía, deportes de alto impacto popular y culturales en general.
Las películas dominicanas Juanita, Colours y Hay un país en el Mundo han sido, en Ottawa y Montreal, poderosos atractivos para el turismo nacional, parte de una estrategia de la oficina del Mitur-Montreal en actos deportivos y gastronómicos, para lo cual se han gestionado alianzas con la embajada dominicana en Canadá e instituciones locales.
En Ottawa las tres películas se proyectaron a casa llena en el auditórium del recinto Ottawa de la Universidad Nacional Autónoma de México, con capacidad para 100 personas. Las funciones fueron precedidas de presentaciones a cargo de Leticia Tonos (directora de Juanita) y de Jose Rafael Sosa (quien introdujo el documental Hay un País en el mundo (José Enrique Pintor) y Colours (Luis Cepeda).
Las tres cintas que son la I Muestra de Cine Dominicano, impresionaron en Ottawa a latinos y canadienses que asistieron y a quienes se le ofreció, como en el cine, palomitas de maíz y gaseosas, creando ese ambiente que solo el cine proporciona.
La muestra es organizada conjuntamente por la Embajada Dominicana en Canadá, la DGCINE y el Ministerio de Turismo, oficina de Montreal.
Cosette García, directora de la Oficina Mitur Montreal, sostuvo a que los tiempos modernos demandan el uso de una gama amplia de recursos de promoción, entre las que figura en primera línea, el cine
Las películas son la cartelera buscan promover tanto el país como la diversidad del cine dominicano representando los géneros incluyen documental, comedia y drama.
La oficina de Mitur desarrolla acciones de gran incidencia que han aportado difusión del país en diversos aspectos, como el Festival Gastronómico del 24 hasta el 28 de febrero, que tuvo el sancocho como plato insignia y en que participaron cheff canadiense preparando platos locales.
Para celebrar el haber tenido en 2018, 904,460 visitantes de Canadá que ocuparon 80,526 habitaciones hoteleras, se puso a bailar merengue, en marzo pasado a los canadienses asistentes al partido de Hockey entre los Montreal Canadiens con los Red Wings de Detroit . Los espectadores pudieron bailar a ritmo de merengue, admirar proyecciones únicas en las pantallas del recinto deportivo.