SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La estructura y original diseño arquitectónico de la Casa de los Vitrales ha acompañado a la ciudad de Santo Domingo durante más de cien años, historia que ha sido recopilada y plasmada por la firma de gestión de activos INICIA, en un libro de colección que rinde tributo a los avances y evolución de la arquitectura de esa época.

El acto de puesta en circulación de Casa de los Vitrales estuvo presidido por Felipe Vicini, presidente ejecutivo de INICIA, quien destacó la importancia de la obra, la cual hace un recorrido por la historia de esta espléndida residencia, desde la adquisición del terreno donde está ubicada hasta el desarrollo de su diseño y construcción en el año 1913, así como su posterior proceso de restauración, ilustrando la imagen de una época, su ambiente y la sociedad a través de los detalles de una casa emblemática.

Vicini destacó que, con la llegada del centenario de la residencia, se emprendió el proyecto de restaurarla fidedignamente a su estado de belleza original, tal como estaba cuando abrió sus puertas por primera vez.

La publicación presenta al detalle los periodos cruciales por los que ha atravesado esta estructura, dando testimonio de la devastación causada por el huracán San Zenón, su posterior renacimiento, el ascenso y caída del régimen autocrático, así como la revolución de abril del 1965, pasando de ser una residencia particular para convertirse en una parte importante de la historia dominicana.

El libro, que narra muchas historias propias de esos tiempos, es el resultado de una extensa investigación liderada por el Arq. José Batlle, en la cual se ha localizado y revisado la documentación histórica relacionada con la construcción de la casa. El mismo presenta dibujos, gráficos e imágenes originales de la época, que recrea el estado de la artesanía de entonces, los avances tecnológicos y el urbanismo, así como la historia del arquitecto que diseñó la majestuosa Casa de los Vitrales, Antonin Nechodoma.

La estructura de la Casa de los Vitrales es el resultado del buen diseño y el empleo excelente y a veces arriesgado de materiales de construcción innovadores para la época, tales como el acero estructural, el hierro, hormigón armado, que resultaron en tecnologías edilicias duraderas y proyectos arquitectónicos emblemáticos y atemporales.

La residencia fue elaborada con atención por el detalle, su funcionalidad y belleza general, donde los espacios cotidianos se enlazan con salones, pasillos, balcones y escaleras, en las que se puede observar las buenas soluciones al detalle arquitectónico y las finas terminaciones escogidas por sus diseñadores y propietarios. Cada habitación está provista de algún detalle que se destaca a primera vista, desde pisos de mármol, mosaicos hidráulicos o de parqué, puertas y ventanas con paneles de exquisitos vitrales incorporados, y terminaciones que hacen que estos espacios sean verdaderamente memorables.

Durante la ceremonia, Felipe Vicini entregó el ejemplar del libro Casa de los vitrales a Beatriz del Cueto, arquitecta conservacionista histórica quien aportó el prólogo al libro, y a los ministros de Cultura y Turismo, Eduardo Selman, y Francisco Javier García; así como al alcalde del Distrito Nacional, David Collado.