SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Guachimán, forma adaptada del inglés watchman, es un término adecuado en español que se usa en la República Dominicana y otros países hispanoamericanos con el significado de guardián o vigilante.
Algunos medios de comunicación dominicanos dudan al momento de escribir este vocablo y por eso suelen encerrarlo entre comillas en frases como «Tomó la decisión de venir a la capital a buscar un empleo como “guachimán” para traer a sus hijos a vivir con él», «Los vigilantes privados, popularmente conocidos como “guachimanes”, ganan RD$ 13,032 cada mes» o «En Un nuevo día Raymond actuó junto a la puertorriqueña Adamaris López donde interpretó a un “guachimán dominicano”».
El Diccionario de la lengua española registra la voz guachimán desde el año 1992 como sustantivo común de uso no solo en la República Dominicana, sino también en Costa Rica, Guatemala, Guinea Ecuatorial, Honduras, Nicaragua, Panamá y Perú. Por su parte, el Diccionario del español dominicano define esta palabra como ‘persona que trabaja como vigilante o guardián’. De manera que, al ser guachimán una voz corriente en nuestro idioma, no es necesario destacarla con cursivas ni comillas.
Por todo esto, en los ejemplos citados habría sido más adecuado escribir «Tomó la decisión de venir a la capital a buscar un empleo como guachimán para traer a sus hijos a vivir con él», «Los vigilantes privados, también conocidos como guachimanes, ganan RD$ 13,032 cada mes» y «En Un nuevo día Raymond actuó junto a la puertorriqueña Adamaris López e interpretó a un guachimán dominicano».
Fundéu Guzmán Ariza es una iniciativa de la Fundación Guzmán Ariza Pro Academia Dominicana de la Lengua, institución sin fines de lucro entre cuyos objetivos se encuentra impulsar el buen uso del español en los medios de comunicación de la República Dominicana. Cuenta con la asesoría de la Academia Dominicana de la Lengua y la Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA) —entidad sin ánimo de lucro fundada en España, en el año 2005, con el auspicio de la Real Academia Española, la Agencia Efe de noticias y el banco BBVA—, así como con el patrocinio económico del bufete Guzmán Ariza.