En mi colaboración del 26 de julio de 2014, atribuí la autoría de las letras de “El funcionario” a Jaime Shanlatte.
¿Por qué se las atribuí a Shanlatte? Porque en los créditos del disco compacto titulado “El funcionario”, de 1983, de Wilfrido Vargas y su orquesta, dice taxativamente que el autor de las letras es Manuel de Jesús Jaime Shanlatte. Como la gente que brega con la literatura que acompaña la producción de discos musicales no es ducha en las reglas del arte del buen decir, muchas veces ignora que una coma mal colocada puede ocasionarle la pérdida de la vida o la fortuna ante los tribunales.
Si los que confeccionaron el texto que acompaña el CD “El funcionario” hubiesen colocado la conjunción de coordinación “y” entre Manuel de Jesús y Jaime Shanlatte, o incluso el signo de barra/, se hubiesen evitado la confusión, pues un error gramatical diseminado en un disco compacto o en un libro cae en el espacio de lo público. Quizá solamente el autor de las letras, el guitarrista y cantautor Manuel de Jesús, el querido Balín para sus íntimos, sabía que él era el verdadero autor de las letras de “El funcionario” y que Jaime Shanlatte debe figurar a su lado por haber sido el autor de los estribillos que acompañan la pieza. Pero de ahora en adelante Manuel de Jesús debe estar atento a que le pongan la “y” o la/entre ambos nombres.
Por esta razón, no me atrevo a citar los nombres de las personas que intervinieron en los arreglos del CD, quiénes fueron los trompetistas, el trombonista, el saxo-alto, el bajo, el tamborero, el bongosero, el güirero, los vocalizadores y los coritas, así como los responsables de la producción y concepto, la producción ejecutiva, el ingeniero de sonido, el responsable de la grabación, la fotografía y los agradecimientos, pues si incurro en error, se necesitaría un mínimo de diez artículos para aclarar tantos entuertos.

Cuando Manuel de Jesús me llamó para precisarme el dato, le di el crédito en la siguiente entrega (23 de agosto de 2014). Y ahora amplío no solo ese crédito, sino el contexto en que escribió el merengue y los premios que ha obtenido, los grandes éxitos desde que entró a Expresión Joven, sus estudios de canto y guitarra y su situación actual como artista.
“El funcionario” –precisa Manuel de Jesús– fue un éxito antes de grabarlo. Lo escribí en 1982 a raíz de un atropello que sufrí de parte de Hatuey Decamps, ministro de la Presidencia cuando el gobierno de Jorge Blanco. Él se enojó conmigo, pero después se le pasó. Los políticos son así. Ya escrito, le mostré las letras a Wilfrido Vargas, quien de inmediato llamó a Yaqui Núñez del Risco para decirle que acababa de leer un gran éxito. Al leerle el texto a Yaqui este dudó que fuera mío y apostó por un extranjero como autor de las letras. Pero cuando hablamos personalmente aceptó que el autor fui yo. Le hicieron la propuesta a Bienvenido Rodríguez, de Karen, y el disco se grabó a finales de 1983 y, efectivamente, ha sido, hasta el día de hoy, un éxito enorme, pues en Colombia, Venezuela, Honduras, Argentina y Panamá lo han usado los políticos de oposición como tema de campaña para desplazar del poder a los gobernantes corruptos. En cada país, le adaptan a su contexto cultural los elementos que son específicamente dominicanos.
Precisa el cantautor que cuando se propuso escribir las letras del merengue no sabía cómo comenzar, pero leyó el cuento “Caperucita roja”, con el mágico “había una vez” se le abrió el camino para su obra, la que significa, en cada momento cultural, una crítica implacable en contra del clientelismo y el patrimonialismo en que vive nuestro país desde su creación como república.
Aclara el autor de “El funcionario” que tiene, desde aquella época, registrado los derechos de su obra musical en ASCAP Internacional y que recibe pingües beneficios por concepto de derechos de autor. Afirma, orgulloso, que “El funcionario” obtuvo en 1984 el premio a la mejor música regional en el mundo otorgado por la revista Billboard/ACE.
Otros éxitos en la carrera artística de Manuel de Jesús han sido “Sagrario sucede a veces”( con letras de Yaqui Núñez del Risco) interpretado por Wilfredo Vargas y sus Beduinos, conjunto del que fue el primer cantante, cuando los “maniyaba” Cholo Brenes, “El candidato”, “Cuando me toca”, “La doncella” y “El funcionario” y en cada una de estas creaciones han participado, alternativamente, el propio autor como cantante, la orquesta de Wilfrido Vargas, Sergio Vargas, Dioni Fernández, Los Nietos del Rey, este último grupo dominicano de Nueva York que también obtuvo el premio de la revista Billboard/ACE en el renglón mejor música regional en el mundo en1985 con “La doncella”. También de aquella época es “Fiquito y Toño”, merengue grabado por primera y única vez por Johnny Ventura, que fue un éxito, pero más limitado que los cinco ya señalados.
Desde la grabación de “El funcionario” hasta el inicio del decenio de los 90, Manuel de Jesús trabajó como gerente de Karen Records. Dejó en el cargo a otro gran cantautor, Víctor Victor, pues, confiesa el ex miembro de Expresión Joven que deseaba incursionar en otros ámbitos de la vida artística. Manuel de Jesús es el responsable, como gerente de Karen, del lanzamiento de la mayoría de los grandes prodigios de la música popular dominicana (Rasputín, Aramis Camilo, Juan Luis Guerra, Los Rosario, Ramón Orlando y otros). Bastaba que Manuel de Jesús dijera: Ese hombre desafina, para que Karen Records le desestimara. Pero él hizo su trabajo. Les abrió la llave del éxito a los demás.
Y de los estudios de Manuel de Jesús, ¿qué decir? Que estudió guitarra con el Terror, Luis Días, el más grande, confiesa, dentro del género “música popular”, y pasó seis años con Ivonne Haza, con quien aprendió la técnica del canto y esto le ayudó a ejercer su puesto de gerente para el que es preciso saber, con simplemente escuchar, si un cantante desafina o si una pieza musical tendrá o no éxito comercial. Esa fue la época en que la soprano Haza documenta en su libro biográfico que también estudiaron con ella la finada Sonia Silvestre, Nancy Alvarez, el difunto Luis Alfredo Chahín, Rhina Ramírez, José Lacay, Henry Soto, Charityn Goico, Maridalia Hernández, María Antonieta Ronzino, Horacio Pichardo, Máximo Valdez, Bienvenido Mojica, Nelson Morales y, por poco tiempo, Fernando Villalona. La mayoría de estos intérpretes devendrían, con el tiempo, luminarias del arte popular (Wilson Roberts Hernández. “Ivonne Haza, la diva dominicana”. SD: Bancentral, 2009, p. 95). Ivonne me informa, personalmente, que también estudiaron canto con ella Raúl Grisanty, Ángela Carrasco, Ramón Orlando y Omar Franco.
Desde la época de Expresión Joven, Manuel de Jesús ha estado involucrado en la política. La nueva trova, de donde viene, fue un compromiso social y político. Trabajó en la organización de 7 Días con el Pueblo; compuso, junto con Chico González, Ramón Leonardo y Puro Eduardo López, la mayoría de los temas de Expresión Joven y, con la agrupación, corrió, en los espectáculos que presentaban en la Capital y sus barrios y en clubes culturales del interior, los mismos riesgos de represión y muerte que signaron los doce años del régimen autoritario de Balaguer. También tuvo a su cargo las grabaciones de Expresión Joven y el reciente CD que contiene los principales éxitos de los grupos que actuaron en el Encuentro Internacional 7 Días con el Pueblo.
Pero hoy, Manuel de Jesús evoca el panorama político de ayer y de hoy, incitado por la observación que le formulo: con el triunfo de Antonio Guzmán en mayo de 1978, las organizaciones políticas tipo PRD, de las izquierdas, de los sindicatos y de las agrupaciones musicales ligadas al compromiso tipo nueva trova, se quedaron sin discurso. Yo no estaba aquí para la época, pero lo percibí desde el extranjero.
El cantautor afina el concepto. –Así es. Pero desde antes, cuando era evidente que Balaguer perdería. Casi todas las agrupaciones musicales se volcaron a trabajar en las campañas políticas. Yo mismo trabajé para Don Antonio Guzmán y luego para Jorge Blanco. Cada cual escogió ese camino porque no había otro y esta ha sido casi siempre la regla hasta hoy. Todos nos quedamos sin discurso, sentencia.
–Ya no había balaguerismo que combatir; abatida la bestia, no se vio más allá, le aclaro. Los partidos políticos y las agrupaciones musicales, culturales y literarias cuyos miembros pertenecían a la pequeña burguesía, se contentaron con desplazar a Balaguer. Fuera de ese objetivo, no tenían otras estrategias a largo plazo, pues no veían más allá del inmediatismo. Ahí se han quedado todos hasta el día de hoy, rondando en torno a los partidos políticos y su llegada al poder. Puesto que ya no pudo ser el mismo de los doce años, incluso en 1986 la vuelta de Balaguer al poder, ante el desastre de Jorge Blanco, fue vista con cierta simpatía por esa misma pequeña burguesía que le combatió sañudamente durante sus primeros tres gobiernos, pero que al final una parte de la izquierda colaboró con él (los técnicos del PCD, el ingeniero Macorís y su equipo, y el equipo del PLD que previó cómo heredar al caudillo).
A partir de 1996, el frente oligárquico, la pequeña burguesía y las clases proletarias encontraron, en los gobiernos del PLD la tusa (el clientelismo y el patrimonialismo) que tan afanosamente habían buscado y lo lograron cuando ya el “maldito viejo” no servía para nada. El ínterin de Hipólito Mejía les supo a vómito. Ahora los poderes fácticos y las clases sociales nativas tratan de sacarse la tusa (quizá con ayuda de la Embajada, si esto es posible), pero mucho me temo que sea demasiado tarde, pues el PLD y sus dos dueños controlan los poderes estratégicos para mantenerse largo tiempo en el poder como régimen de partido único y ya no tienen necesidad del apoyo de esas tres clases, pues gobiernan por sí y para sí en lugar de tales clases, sin ser burguesía nacional, y han obligado a los llamados partidos de oposición y a los aliados a jugar el papel de mascarones de proa para asustar, pero en realidad es para que Miguel Vargas Maldonado, Hipólito, Abinader, los Vincho, Moreno, la Convergencia, el Bloque Progresista y cuantos pululan a su alrededor, sirvan para divertir y hacer reír a la sociedad mientras el verdadero Poder gobierna en paz. (Continuará).
Publicado en el suplemento Areíto del periódico Hoy de fecha 6 de septiembre de 2014 y reproducido en Acento.com de la misma fecha, con autorización del autor.
Merengue El Funcionario