MÉXICO DF.- Voluptuosa desde todos los ángulos de su figura hasta su potente voz, la artista estadounidense Beyoncé hizo hoy una parada en su gira mundial en la capital mexicana para mostrar sus dotes ante unas 20.000 personas que abarrotaron el Palacio de los Deportes.

Con mirada desafiante y agitando sus caderas infinitas la artista estadounidense apareció en este escenario de la capital mexicana en torno a las 9.30 de la noche hora local (02.30 GMT), vestida con un escueto mono blanco.

Y lo hizo cantando el tema "Run the World (Girls)", primer sencillo de su cuarto álbum de estudio "4″ para dejar claro que, como dice su canción, las mujeres son las que dirigen el mundo y ella más que nunca lo hace sobre un escenario.

Con un espectáculo excesivamente controlado y sin lugar a la improvisación, la artista ofreció entre juegos de luces y sombras, pequeños fuegos artificiales y chispas, temas como "End of time" y otros más populares como "If I Were a Boy".

La de hoy fue una parada más en su gira internacional "The Mrs. Carter Show World Tour", título que hace referencia a su matrimonio con el rapero Jay-Z (Shawn Carter), un tour frenético que comenzó el 15 de abril en Belgrado y que acabará en diciembre con más de un centenar de conciertos a sus espaldas.

"¿Cómo os sentís? Se os ve muy contentos", fueron algunas de las escuetas palabras que dirigió la artista de 32 años a su público, a quienes animó a llamarla "Miss Carter", recordando al que es su esposo desde el año 2008 y con el que tiene una niña, Blue Ivy, nacida en enero de 2012.

En el "show hubo tiempo también para recordar temas antiguos como "Baby Boy" o "Crazy in Love", canciones del que fuera su primer álbum como solista en 2003 titulado "Dangerously in Love", el cual compuso cuando todavía era miembro del grupo que la vio nacer, las Destiny’s Child, formado con Kelly Rowland y Michelle Williams.

"Diva", "Naughty Girl o "Party" fueron otros de los temas que la cantante interpretó en el escenario, intercalados con descansos para cambiarse de vestuario, prendas de distintos colores, pero todos modelos imponentes, llenos de lentejuelas y brillos.

Llegaron también temas como "Freakum dress", "Why don’t you love me" o "1+1″, que comenzó con un solo de piano de una pianista y acabó con la propia Beyoncé tumbada sobre este instrumento.

Uno de los momentos más íntimos de la noche fue cuando la artista, interpretando el tema "Irreplaceable" con algunas frases en español, recorrió un pasillo entre el público, protegida por sus enormes guardaespaldas y llegó hasta una plataforma ubicada en el centro del recinto, desde la que se acercó y saludó a algunos de sus seguidores.

Para el final dejó dos de sus temas más populares, "Single Ladies", acompañado de su popular y pegadiza coreografía, y "Halo", que volvió a cantar y bailar sobre la plataforma central, desde la que ondeó una bandera de México que alguien del público le regaló.

Tras una hora y media subida al escenario, la estadounidense se despedía con gestos de cariño y un escueto "Que dios os bendiga y hasta la próxima".

Un cartel luminoso con la palabra "Fin" dejaba claro que esta noche no había tiempo para los bises, por más que el público los solicitara.

Tras estas dos actuaciones en México (anoche cantó en la norteña ciudad de Monterrey), Beyoncé continúa su cargada agenda que la llevará dentro de dos días a Puerto Rico y, en dos semanas más, a cambiar de continente para visitar Nueva Zelanda y Australia.